¿El profesor Oak y la madre de Ash... juntos? No es una teoría nueva, pero los creadores de Pokémon siguen dándonos motivos para creer en ella. En el episodio más reciente del anime, Ash llama a su madre para contarle que vuelve a Kanto y, como de costumbre, el profesor Oak andaba por allí:
“En serio, ¿qué hace el profesor Oak en casa de la mamá de Ash?”
Oak y Delia Ketchum, que es como se llama la madre de Ash, son buenos amigos desde hace muchos años. Para muestra, esta fotografía que vimos en El hechizo de los Unown, la tercera película de Pokémon:
Los personajes de Pueblo Paleta parecen estar tan unidos que hasta comparten escena en los créditos finales del anime. ¿Casualidad?
Las casualidades pasaron a ser sospechas en la primerísima temporada de la serie original. Durante un episodio censurado en Estados Unidos y nunca emitido en España ni en Latinoamérica, el profesor Oak y la madre de Ash aparecen juntos de vacaciones —pero no llegan a explicar por qué:
“¿Qué haces aquí?”, pregunta Ash. “Lo explicaremos más tarde”, dice Oak.
Más adelante, en un episodio de 2003, vimos al profesor Oak escribir y leer un poema de amor. Según el narrador del anime, Delia estaba convencida de que el poema era para ella (pero también lo estaba Bulbasaur).
La teoría del romance se complica si tenemos en cuenta que el padre de Ash no ha salido nunca en la serie. La explicación oficial es que, al igual que Ash, su padre se fue a recorrer el mundo con el objetivo de ser un maestro Pokémon. “Algún día nuestros caminos se cruzarán”, explica Ash. Pero su padre ni siquiera aparece en las fotos, solo Delia y el profesor Oak:
De esta coyuntura surge la idea de que el profesor Oak podría ser ni más ni menos que el verdadero padre biológico de Ash Ketchum. Pero eso complica demasiado las cosas porque entonces Ash sería el tío de Gary, que es el nieto del profesor Oak. Yo me quedo con la idea de una simple aventura:
Es más. En el juego, Pueblo Paleta solo tiene tres casas: la de Ash, la de Gary y el laboratorio del profesor Oak. De alguna manera tenían que entretenerse en esa aldea minúscula donde nunca pasa nada.