
El director, guionista y productor J.J. Abrams ha reflexionado en una entrevista acerca de uno de sus trabajos más polémicos de la última década: la trilogía de secuelas de Star Wars. Y entre sus conclusiones, destaca la importancia de tener un plan, un camino que seguir.
Algo que no parecen haber tenido en el desarrollo de esta trilogía.
Amada por algunos, odiada por otros, la llamada trilogía de secuelas de Star Wars (Episodios 7, 8 y 9) es una montaña rusa de emociones para los fanáticos de la saga. Tras haber arrancado con un episodio claramente inspirado en la primera película de la saga, The Last Jedi tomó un giro distinto, un enfoque quizás arriesgado con el que apostaba hacia nuevas ideas, lo que generó un mar de polémicas. Hay quienes aman The Last Jedi, hay quienes la odian, pero de igual modo, J.J. Abrams regresó para dirigir un Episodio 9 que originalmente no iba a ser de él. Parecía, se sentía, como un control de daños.
Pero el problema, para muchos (y me incluyo), no está en si las películas hicieron las cosas bien o no de forma individual. El problema está en la falta de coherencia que se siente al ver las tres películas como una trilogía, como lo que son. Episodio 9 parece haber sido creada para contradecir mucho de Episodio 8, y se siente mal. ¿Acaso esto no se habría evitado si, desde un comienzo, hubiese un planteamiento uniforme y coherente de la trama general a lo largo de la trilogía?
¿Acaso no era importante tener un plan? ¿Por qué no lo tuvo? En una entrevista con Collider, Abrams reflexiona:
“He estado involucrado en una serie de proyectos, en la mayoría de los casos series, que han tenido ideas que crees saber a donde van, pero a veces suceden cosas como que el desarrollo de algún personaje, alguna relación o algún momento, que crees que será muy bien recibido, no funciona; por otro lado, también hay momento en los que piensas que algo será simplemente un momento menor, un detalle sin casi importancia, y de repente se convierte en una parte muy importante de la historia. Siento que lo que he aprendido como una lección varias veces, [...] es que tienes que planificar las cosas lo mejor que puedas, y siempre necesitas poder responder a lo inesperado. Y lo inesperado puede presentarse en todo tipo de formas, y creo que no hay nada más importante que saber a dónde vas”.
Hay proyectos en los que he trabajado en los que teníamos algunas ideas pero no las habíamos desarrollado lo suficiente, a veces teníamos ideas pero no se nos permitió hacerlas de la manera que queríamos. He tenido todo tipo de situaciones en las que planeas las cosas de cierta manera y de repente te encuentras haciendo algo que es 180 grados diferente, y luego a veces funciona muy bien. Algunas veces cuando no funciona es porque es lo que planeaste, y otras veces cuando no funciona es porque no [tuviste un plan].
“Nunca se sabe realmente cómo saldrán las cosas, pero he aprendido, en algunos casos por las malas, que tener un plan es lo más importante, porque de lo contrario no sabes lo que estás planteando. No sabes qué enfatizar.”
Y con esta larga reflexión, esquivando mencionar directamente a Star Wars por motivos obvios (posibles cláusulas de confidencialidad, entre otras cosas), Abrams reconoce la importancia de tener una coherencia, un planteamiento que vaya de un inicio a un final a lo largo de un proyecto que consista en una o varias partes. La trilogía de secuelas claramente necesitó de esto. [vía Collider]