A inicios de 2016 la policía neerlandesa anunció su programa de entrenamiento de águilas para interceptar drones sospechosos. La idea era abatir en pleno vuelo drones desconocidos que sobrevolaran zonas no autorizadas usando estas aves rapaces, pero menos de dos años más tarde han abandonado el programa.
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La policía de Países Bajos ha anunciado el fin del programa y que retirarán todas las águilas que había entrenado para este propósito, lo que quiere decir que las enviarán a nuevos hogares. Las razones son sencillas, durante todo este tiempo no han tenido necesidad de usarlas en misiones reales. Además, las aves no obedecían las órdenes en todas las ocasiones, lo que resultaría en un verdadero problema en caso de una misión de emergencia.
Estas águilas fueron entrenadas desde muy pequeñas para interceptar drones siguiendo el sonido que hacen al volar, hasta sujetarlos por las partes en las que no están los rotores y llevándoselas lejos de la zona en la que lo atrapen. Las águilas básicamente cazan los drones, lo que evita que caigan sobre personas como sucedería en el caso de ser derribados con armas.
Afortunadamente Países Bajos no se ha visto bajo la amenaza de ataques terroristas mediante drones, por lo que no tuvo que usar a su flota de águilas. En el futuro tendrán que usar sistemas tecnológicos antidrones en lugar de confiar en aves rapaces. Además de Países Bajos, Francia también anunció este año que entrenaría águilas para derribar drones. [NOS vía Engadget]