
The Associated Press publicó una historia el jueves por la mañana, basándose en el medio chino Ningbo Evening News, en la que advertía que las autoridades chinas iban a llevar 100.000 patos a Pakistán para ayudar a combatir los enjambres de langostas que asolan el país. Los medios de comunicación de todo el mundo se creyeron la historia de patos vs langostas antes de que AP modificara su noticia inicial porque “habían surgido numerosas dudas” sobre la noticia china.
Bueno, nosotros tenemos algunas respuestas al respecto. Y amigos, siento tener que informaros de que no hay ningún todopoderoso ejército de patos dirigiéndose a Pakistán para ayudar a derrotar a las malvadas langostas. Es una pena porque realmente se han convertido en una emergencia nacional en el país asiático. Estos enjambres están devastando naciones del este de África como Kenia y Etiopía y las autoridades han descrito la situación como “extremadamente alarmante”.
Esto se debe en parte a que estos insectos son tremendamente voraces: la Organización de alimentación y agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) dijo que un enjambre del tamaño de París puede comer la misma cantidad de comida que la mitad del país en un solo día. Esta es una cantidad de comida que en esta parte del mundo no se pueden permitirte perder. Más del 40% de las personas que viven en las regiones afectadas por las langostas ya están en estado de desnutrición.
Así que imagínate lo emocionados que debían estar al escuchar que un ejército de patos vendría al rescate. Después de que un medio de comunicación chino adelantase la noticia y citase a Lu Lizhi, un investigador de la Academia de Ciencias Agrícolas de Zhejiang, la historia corrió como la pólvora antes de que Associated Press cuestionara la veracidad de la historia. Yo lo entiendo. Quiero decir, ¿un ejército de 100.000 patos? ¿Quién no querría escribir sobre algo así? Desafortunadamente, ni siquiera eso hubiera sido suficiente para detener a estos enjambres de langostas.
Según la FAO, un kilómetro cuadrado de enjambre puede estar compuesto por entre 40 y 80 millones de langostas. Un ejército de 100.000 patos podría comer unos 20 millones de langostas en un día, según Keith Cressman,un experto de la FAO. Esto es solo medio kilómetro cuadrado de bichos. En la zona del Cuerno de África, los enjambres se han extendido por cientos de kilómetros cuadrados en algunos países, dijo Cressman.
“No hay suficientes patos, y no pueden comer suficientes langostas para tener un impacto significativo”, dijo Cressman.
Y no es por fastidiar tus sueños sobre una batalla épica en el desierto entre patos y langostas, pero los patos generalmente ni siquiera se comen a estos insectos. Los patos son acuáticos, y suelen comer insectos de humedales que recogen con sus picos en el agua, defiende Michael Eichholz, profesor de zoología de la Universidad de Illinois. Esto no solo hace que los patos se alimenten, sino que también estén hidratados.
Por eso generalmente suelen estar todo el tiempo en estanques, lagos y ríos, no en el medio del desierto donde se han congregado estos enjambres de langostas. Cuando le pregunté a Eichholz si los patos podrían hipotéticamente darse un festín con las langostas si los dejaban caer en medio de un enjambre, se echó a reír antes de explicarme el problema.
“Estoy seguro de que podrían atrapar langostas y potencialmente sobrevivir, pero hay ciertas especies de animales que han evolucionado para obtener agua de ciertos alimentos, por lo que en realidad no tienen que beber agua”, dijo Eichholz. “No estoy al tanto de ninguna especie de pato que obtenga suficiente humedad de alimentos como para no tener que beber agua, por lo que no los puedes dejar en un ambiente árido sin una fuente de agua”.
Incluso los patos domesticados, que normalmente no viven en el agua, lucharían por sobrevivir en el árido paisaje desértico, dijo Eicholz.
Lamentablemente, lo del ejército de patos no funcionaría ni aunque fuese verdad. Pero bueno, como regalo de despedida te dejo con este vídeo (equivocado). De momento, tendremos que seguir soñando con nuestro ejército de patos.