Tecnología, ciencia y cultura digital
We may earn a commission from links on this page

Steve Ballmer es el gran problema de Microsoft, dice un ex-directivo de la compañía

We may earn a commission from links on this page.

El jefe de Microsoft ejerce un poder casi dictatorial, destituye a todo aquel que amenace su puesto y no es el mejor para liderar la compañía. Así piensa un ex alto directivo de Microsoft que trabajó en la firma durante casi 20 años. Hacía bastante tiempo que no se oían críticas tan duras hacia Ballmer, y menos de un ex alto directivo. Quizás los 13 años que lleva al frente como consejero delegado, ahora sí, le están empezando a pasar factura.

Joachim Kempin trabajó hasta el 2002 buena parte de su carrera al frente de la unidad de ventas de Windows. Ahora ha publicado un libro muy crítico con Ballmer, a quien acusa, entre otras cosas, de impedir el ascenso de cualquiera que amenace su puesto de CEO. 

Y da un ejemplo que vivió de cerca, el de Richard Belluzzo, quien ayudó a lanzar la Xbox con éxito, llegó a COO, y al que Ballmer más tarde, básicamente, le pondría la zancadilla, según Kempin. 

Belluzo no podía ni respirar. Cuando trabajas tan de cerca con Ballmer y él piensa "quizás este tío algún día quiera mi puesto", Dios mío, entonces tendrás todavía menos aire para respirar. Al final funciona así.

Advertisement

Se ha especulado mucho con que algo parecido pasó hace poco con Steven Sinofsky, al frente de Windows, y también antes con Kevin Johnson o Ray Ozzie. Todos llegaron en algún momento a sonar como posibles sustitutos de Ballmer. Todos se fueron por la puerta de atrás. 

Joachim Kempin publica ahora su libro, titulado 'Resolve and Fortitude: Microsoft's "secret power broker" breaks his silence' y claro, viene a hablar de su libro y a crear polémica. Pero mucho de lo que comenta a Reuters parece un fiel reflejo de la realidad actual en Microsoft. Según Kempin, si la compañía quiere volver a ser lo que fue, necesita un cambio en su dirección, empezando por Ballmer.

Advertisement

Y tal vez tenga sentido: durante estos últimos 13 años, Microsoft ha logrado grandes cosas (Xbox, por ejemplo), pero ha perdido también muchas oportunidades (tablets, móviles...). Tantas que en algunas de ellas quizás sea ya demasiado tarde. [Reuters]

Foto: Getty Images