
Desde du debut, allá por 2014. Oneplus ha crecido hasta convertirse en un fabricante sólido que hace móviles de calidad pero a un precio elevado. El nuevo OnePlus Nord quiere recuperar el trono de los Android buenos, bonitos y baratos. ¿Lo consigue? La respuesta a continuación.
La idea detrás del OnePlus Nord es ofrecer al usuario una experiencia lo más parecida a la de un gama alta, pero a un precio mucho más reducido. La versión básica del móvil ofrece 8GB de RAM y 128 de ROM a un precio de 399 euros. Le sigue una versión más potente con 12/256 GB que logra igualmente mantenerse por debajo de la barrera psicológica de los 500 euros (499). Esta última es precisamente la que hemos probado. ¿Logra el Nord dar la experiencia de un gama alta? En nuestra primera toma de contacto desde luego parecía que sí, aunque un examen más largo y cuidadoso ha terminado por revelar sus puntos más débiles. Veámoslos.
Diseño y construcción
Mi móvil actual es un Huawei Mate 30 Pro, y aunque no es mucho más grande, confieso que me da cierta envidia el OnePlus Nord. Se siente mas fino y ligero. En términos de dimensiones y peso, el Nord es casi idéntico, milímetro arriba, milímetro abajo al Huawei P30 Pro por citar un móvil hoy día muy popular que posiblemente hayas tenido en la mano alguna vez.
La apariencia del Nord engaña mucho porque parece más caro de lo que realmente es. Es cierto que OnePlus ha abandonado el marco metálico por uno de plástico con acabado metálico y que el cristal de la parte posterior es de un tono uniforme sin el efecto ahumado tan característico en la marca. Pese a ello, el Nord respira calidad. Es difícil encontrar un detalle mal ajustado o una pieza cortada con desgana. Su apariencia externa es fantástica y mantiene también algunos detalles propios de la marca que son muy útiles, como el control deslizante de volumen. No tiene puerto de auriculares de 3,5 mm, pero a estas alturas ya no se le puede echar en cara eso a ningún móvil. Hay que vivir con ello.
Pantalla
¿Para qué queremos realmente pantalla curvas en los móviles? Es una pregunta seria que quizá algún día debería comentar con Anselmo, nuestro consultor extraterrestre para paradojas humanas. En las últimas semanas me han llegado dos terminales con pantalla plana. Uno es el OnePlus Nord. El otro es el brutal Asus ROG Phone 3. Los fabricantes aseguran que la pantalla curva proporciona una experiencia más inmersiva, pero sinceramente creo que es una tomadura de pelo más del marketing. Para lo único que sirve es para que el móvil sea más frágil y más difícil de sujetar.

La Pantalla del Nord es una Fluid Amoled de 6,44 pulgadas 20:9 con resolución 2400 x 1080 y tasa de refresco de 90 Hz. Poco más se le puede pedir a una pantalla. Si la comparamos con la del OnePlus 8 Pro descubriremos que el contraste o la luminosidad no son tan buenos, pero la diferencia es mínima y el Nord cuesta basicamente la mitad que el Pro. Lo importante es que se ve muy bien salvo situaciones extremas como a pleno sol. Sus márgenes son delgados y el agujero en pantalla, aunque grande por ser una cámara doble, no molesta. Por cierto, OnePlus ha diseñado muy sabiamente sus fondos de escritorio. Todos ellos están diseñados con una zona oscura que disimula la dobla cámara en la pantalla.
Sonido
El sonido externo del OnePlus Nord sale por un único altavoz situado en el borde inferior, junto al puerto USB-C. No suena mal, y tiene suficiente potencia como para que puedas dar la turra en el metro o por la calle si ese es tu deseo, pero es un paso atrás respecto a los dos altavoces estéreo del OnePlus 8 Pro, por citar solo una referencia. La falta de sonido estéreo se nota especialmente si vas a ver una película o jugar a videojuegos. De nuevo, no es el fin del mundo, pero algo más de equilibrio y graves no le hubiera venido mal.

Cámaras
Llegamos al punto en el que mi experiencia con el OnePlus Nord se ha desinflado bastante. El móvil tiene un conjunto de cámaras muy parecido al del OnePlus 8 que consta de:
- Una cámara principal de 48Mpx f/2.75 con estabilización híbrida y capaz de grabar vídeo 8K a 30fps.
- Una cámara gran angular de 8Mpx f/2.4 con 119 grados de campo visual
- Una cámara gran angular de 2Mpx f/2.4
- Un sensor de profundidad de 5Mpx f/2.4
La cámara principal es la misma que la del OnePlus 8, y no es en absoluto una mala cámara, pero por alguna razón siento que no saca tanto partido al sensor Sony IMX586 como lo hace el OnePlus 8. Esa sensación se acentúa en el modo nocturno. Las fotos son oscuras y tienen un procesado peor que el que OnePlus nos tiene acostumbrados. De nuevo, está bien. Nada que objetar. Probablemente estamos acostumbrados a unos resultados tan espectaculares que ahora el Nord se nos queda algo corto.
Gran angular
El problema del Nord son las otras cámaras. La cámara gran angular, por ejemplo, siempre es bienvenida, pero 8 megapíxeles se quedan tan por debajo de los 48 de la principal, que a poco que ampliemos, las fotos pierden demasiado detalle. A continuación, una foto con la cámara normal. A su derecha un detalle de la misma extraído del archivo original a resolución completa. Las letras de la pared son perfectamente legibles.

Bajo estas líneas, la misma escena, tomada con la lente gran angular, y un detalle extraído de ella. Las letras no se leen por mucho que hagas zoom. Por supuesto, es una simple cuestión de píxeles. Una imagen tomada con la cámara principal mide 4000 x 3000 puntos y pesa 4,75MB. Una cámara tomada con la lente gran angular mide 3264 x 2448 píxeles y pesa 2,66MB. En el OnePlus 8 no se notaba tanto porque la cámara gran angular tenía un sensor de 16Mpx, pero aquí la diferencia sencillamente es excesiva por mucho que trates de enmendarlo por software.

Eso sí, al menos la experiencia entre ambas cámaras es idéntica a nivel de color, como también lo es si aplicamos el zoom. En este útimo caso es lógico ya que hablamos de un zoom por recorte de la cámara principal, pero el trabajo de la app de cámara en este sentido sigue siendo notable.

Modo macro
El mismo problema que tengo con el gran angular, lo tengo también con la cámara macro. La resolución de su sensor de 2Mpx es tan ínfima (1600 x 1200 y 663KB) que en todos y cada uno de los casos obtengo mejores resultados acercando a tope la cámara principal y recortando, o simplemente usando el zoom, con la ventaja de que además la foto con zoom tiene 4000 x 3000 píxeles con un tamaño de 4,45MB y un equilibrio de color infinitamente mejor.

Modo retrato
Finalmente está el sensor de profundidad de 5Mpx. La diferencia es que el Oneplus Nord no usa este sensor de manera independiente, sino como apoyo para aplicar un efecto bokeh a los retratos. En ese sentido es más eficaz que el macro o el gran angular porque usa toda la resolución del sensor de la cámara principal. El recorte de la persona en primer plano es bueno, pero a menudo comete errores dejando nítidos otros objetos a la misma profundidad. Por lo demás, sacar una foto en modo retrato ofrece la misma experiencia que hacerlo con la cámara principal en términos de contraste o color. La única diferencia es el bokeh por software.
El modo retrato, por cierto, solo funciona cuando detecta una cara. Si sacas una foto a algo vagamente humanoide y los algoritmos no detectan ninguna cara el desenfoque del fondo por software será menos preciso.

Llegados a este punto, no dejo de preguntarme por qué el Nord tiene cuatro cámaras. La realidad es que, a nivel de uso, la cámara macro sobra, y la gran angular tampoco aporta tanto como para justificar su presecia. El terminal se hubiera beneficiado mucho más de tener solo tres cámaras, pero con un gran angular de 16Mpx como el del OnePlus 8. Probablemente hasta hubiera tenido más sentido dejar solo la principal y meter un sensor TOF más preciso a la hora de medir la profundidad o un zoom.
¿Significa eso que el Oneplus Nord es malo en términos fotográficos? En absoluto. Tiene una cámara principal muy buena para tratarse de un móvil de 500 euros, pero no dejo de pensar en que el Nord podría haber sido incluso más barato si en OnePlus no se hubieran cegado con la cantidad en lugar de la calidad. Buen ejemplo de eso es el Pixel 4a, que con solo una cámara que encima es peor que la del Nord saca mejores fotos nocturnas que este gracias a su excelente procesado de software. Puedes leer nuestro análisis del nuevo móvil barato de Google aquí.

En cuanto a la cámara frontal. De nuevo luces y sombras. El Nord tiene una cámara frontal principal de 32Mpx, el dobre que el OnePlus 8. La acompaña una cámara gran angular de 8Mpx y 108 grados para que nos podamos hacer selfies en grupo. Sobre el papel pinta muy bien, pero de nuevo la diferencia entre ambas es notable en términos de resolución. Las fotos con el gran angular no son precisamente nítidas y a menudo se aprecian artefactos. De nuevo, no puedo evitar preguntarme si esa segunda cámara era necesaria.
Usando el OnePlus Nord
Aunque no es tan fulgurantemente rápido como los OnePlus 8 (es lo que tiene bajar un peldaño en procesador y tener sistema de archivos UFS 2.1 en vez de 3.0) el Snapdragon 765G del Nord mueve todo con fluidez y sin tirones. Incluso he podido jugar largas sesiones a juegos como PUBG Mobile, Lineage 2 o Dead Trigger 2 sin notar ninguna sobrecarga o lag. De hecho apenas he sentido que el movil se calentara, lo cual también dice mucho de la calidad de construcción.

A nivel de sensores, tanto el de huellas bajo la pantalla como el sistema de reconocimiento facial funcionan rápido y sin problemas. No he notado diferencia entre ellos y los OnePlus 8. La batería de 4115 mAh es otro apartado sólido del Nord. Podemos confiar en que nos aguantará todo el día sin ningún problema. En los peores días de uso he podido llegar al final de la jornada con entre un 20 y un 30% de batería restante.
Mejor incluso que eso es el hecho de que el Nord mantiene el soporte a carga rápida de 30 vatios por USB-C. En media hora habremos rellenado el 70% de la batería del teléfono. No tiene carga inalámbrica, pero ese es un complemento demasiado caro para un gama media.

En resumen
El OnePlus Nord tiene una manufactura y unos acabados que parecen propios de un móvil mucho más costoso. Su referencia inmediata, por cuestiones de actualidad, es el Pixel 4a. El modelo de Google es algo mejor en fotografía y su pantalla, aunque más pequeña, tiene un pelo más de resolución. El Nord, sin embargo, es más potente y tiene 5G, lo cual es una apuesta de futuro.
Para mi gusto, Oxygen OS 10 funciona mejor que la versión sin aditivos de Android 10, y el compromiso de OnePlus de proporcionar tres años de actualizaciones al sistema operativo hacen que merezca la pena gastarse un poco mas en el Nord. Para terminar, los fabricantes (no solo OnePlus) harían bien en dejar de hacer tanto caso a los departamentos de marketing y su adicción a las cifras y más caso a los ingenieros que diseñan cámaras.