
En el CES de este año Samsung presentó a bombo y platillo una versión más pequeña de The Wall, el televisor que presentó hace exactamente un año. ¿La novedad? Este nuevo modelo está dotado de tecnología MicroLED. ¿Es el MicroLED un simple nombre comercial o algo más? Esto es lo que necesitas saber.
El televisor The Wall original era un monstruo de 146 pulgadas que podía adoptar cualquier formato y tamaño gracias a que estaba formado de pequeñas “baldosas” LED apodadas precisamente MicroLED. , fue el primer modelo con esa tecnología.

También es la primera vez que Samsung muestra en directo cómo funciona eso de unir varias baldosas LED sobre la marcha. En su Stand tienen una versión aún más grande de The Wall: 219 pulgadas. El nuevo televisor MicroLED de 75 pulgadas es una prueba de concepto que demuestra que la tecnología MicroLED es escalable y estable. En otras palabras: MicroLED en otros dispositivos más pequeños. MicroLED en todas partes.
LED, OLED y MicroLED
Actualmente, el mercado de pantallas está dominado por los LCD, pantallas retroiluminadas mediante diodos LED que la gente conoce comúnmente por televisores LED. Luego están los diodos LED orgánicos u OLED. La principal diferencia entre ambos es que los píxeles LED necesitan un LED que los ilumine y producen el color aplicando filtros, mientras que los píxeles OLED emiten su propia luz y colores de manera independiente.
Los MicroLED son un fantástico monstruo de Franskenstein que combina ambas tecnologías. Por un lado emiten su propia luz verde, azul y roja sin necesidad de retroiluminación. Por el otro, sus píxeles no se basan en compuestos orgánicos como los OLED. Eso quiere decir que no se degradan tanto y son energéticamente mucho más eficientes. Solo eso ya las hace muy atractivas para productos que precisan componentes que no se coman la batería, como los móviles o los laptop.

Pero los MicroLED son atractivos por otras razones. Al igual que los OLED, pueden desactivarse para producir tonos puros de negro. Además, generan un brillo mucho mayor con un grosor de panel más fino y, como decíamos arriba, gastando menos energía.
Puedes estar tranquilo. Tu televisor sigue siendo nuevo
Todo esto, tan burdamente explicado, es una tecnología aún en pleno desarrollo. Hace un año Samsung la enseñó por primera vez. En este CES ha demostrado que puede escalarse a tamaños pequeños llenando su Stand de baldosas luminosas magnéticas que se engarzan unas con otras para formar pantallas más grandes. Hasta se puede añadir una pequeña baldosa altavoz para tener una especie de pantalla deconstruida.

¿Llegarán estas baldosas al mercado? Casi con toda probabilidad no. Al menos no este año. Se trata de una prueba de concepto, un truco de feria para que los visitantes se asombren y salgan contentos. La verdadera tecnología está dentro de cada baldosa, en los Píxeles, y seguramente en Samsung están estudiando con mucho detenimiento cómo integrar esos píxeles en dispositivos móviles. No son los únicos. Se cree que Apple tiene su propio laboratorio secreto dedicado a investigar MicroLED.
Mientras piensa cómo integrar los MicroLED y va haciendo que nos acostumbremos a oír ese nuevo término, Samsung sigue añadiendo fenomenales televisores QLED a su catálogo. Algunos con resolución 8K. Otros con 98 pulgadas. Parecen pequeños comparados con una pared MicroLED de 219 pulgadas, pero van a seguir siendo lo más en calidad de imagen para el salón durante muchos años. Si acabas de comprar uno no tienes nada de lo que inquietarte.
Resulta un poco descorazonador que la gente mire las baldosas MicroLED y tuerza el gesto pensando que no es nada del otro mundo. Es cierto que no es una tecnología que quite el hipo a primera vista, pero es muy prometedora y probablemente la llevemos en el bolsillo dentro de unos años. Enseñar este tipo de avances, aunque nos deje fríos y un poco confundidos, es para lo que sirven ferias como el CES.