
Al igual que ocurre con los puertos USB, SD y demás, no todas las entradas HDMI son iguales, y el uso o no de la correcta podría tener un efecto inmediato en cosas como la calidad de la imagen, la velocidad de fotogramas y la latencia.
Si saber qué versión de HDMI teníamos entre manos no era ya una tarea lo suficientemente tediosa, ahora sabemos que el último estándar HDMI 2.1, bueno, no es que esté muy estandarizado. Una investigación de TFTCentral reveló que es posible que el televisor o el monitor que compres con “HDMI 2.1” no admita ninguna de sus funciones más recientes.
Desde TFTCentral comenzaron a sospechar sobre este tema cuando vieron que un monitor Xiaomi con soporte para HDMI 2.1 solo alcanzaba las especificaciones del HDMI 2.0. En lugar de una resolución 4K, el panel se veía limitado a 1080p. Y lo peor es que, técnicamente, Xiaomi no había hecho nada malo. Todo se reduce a una cuestión semántica y algunos turbios criterios (y hostiles para el consumidor) establecidos por el organismo que administra las licencias HDMI.
En este caso, Xiaomi cumplía con los requisitos legales al introducir esta pequeña nota al final de los términos y condiciones del dispositivo: “Debido a la subdivisión de los estándares de certificación HDMI, HDMI 2.1 se divide en TMDS (donde el ancho de banda es equivalente al HDMI original 2.0 y a los protocolos FRL). La interfaz HDMI 2.1 de este producto es compatible con el protocolo TMDS, la resolución máxima admitida es 1920 × 1080 y la frecuencia de actualización máxima es 240Hz ”.
Nos estamos metiendo en aspectos algo técnicos pero, en resumen, HDMI 2.0 se trata de un subconjunto de HDMI 2.1, lo que significa que sus especificaciones se encuentran dentro de este nuevo estándar. El organismo regulador de estándares incluso dijo que ya no certificaría bajo el sobrenombre de HDMI 2.0, y le dijo a TFTCentral que HDMI 2.0 “ya no existe” y que las características y capacidades del HDMI 2.1 son opcionales. Siempre que un monitor admita uno de los estándares más nuevos, se podrá considerar como HDMI 2.1.
Como era de esperar, HDMI 2.1 consta de muchos estándares, por lo que los fabricantes de televisores y monitores podrían, en teoría, coger la especificación más sencilla y agregarla a sus (anteriores) puertos HDMI 2.0 para poder marcar que tienen la certificación de HDMI 2.1.
El organismo regulador de HDMI incluso confirmó a The Verge que lo que estaba haciendo Xiaomi era perfectamente legal y que dependemos de que los fabricantes sean honestos al hablar sobre sus productos. El problema es que rara vez lo son.
La historia nos dice que incluso las marcas de mayor renombre buscan siempre la forma de utilizar estos términos grandilocuentes para vender sus productos. Hemos visto a los operadores de telefonía móvil utilizar pseudo etiquetas 4G y 5G, a marcas de televisores vender dispositivos con compatibilidad HD pero sin poder mostrarlos a esa resolución, y a monitores de marcas conocidas que afirman tener HDR a pesar de que no son compatibles con el estándar oficial.
Es un escenario frustrante para los consumidores, que teóricamente deberían ser los priorizados aquí. Ver la pegatina de HDMI 2.1 en las especificaciones de un televisor no significa necesariamente que pueda admitir resoluciones de hasta 10K, un ancho de banda de 48 Gbps o HDR dinámico. Y aunque estas fueron siempre solo características teóricas, habíamos asumido incorrectamente la existencia de un baremo mínimo en el que podíamos sentirnos cómodos. Ahora, este mínimo incluye las especificaciones HDMI 2.0 y podría implicar que te compres un dispositivo con una resolución máxima de 1080p, por ejemplo.
HDMI 2.1 es la característica de moda últimamente debido a las funciones que habilita en las consolas y PC de última generación, entre las que destaca la capacidad de ejecutar juegos a 4K y 120Hz. Muchas de sus ventajas se perderán si tu dispositivo no cuenta con el puerto adecuado o con un cable HDMI de alta velocidad. Así que recuerda: lee siempre la letra pequeña.