
La pandemia de covid-19 ha demostrado que somos bastante malos calculando la distancia física respecto a otras personas. Un ingeniero ha solucionado ese problema dotando a un casco dotado de algo que solo puedo definir como una torreta láser giratoria.
StupotMcDoodlepip ha utilizado piezas impresas en 3D para sujetar un puntero láser en el extremo de una pequeña torre giratoria sobre un casco. Una vez correctamente puesto sobre la cabeza, el movimiento del puntero a alta velocidad dibuja un círculo de luz de dos metros de radio alrededor del portador.
No puedo dejar de admirar la efectividad del sistema. Incluso aunque no emitiera ese amenazador perímetro de seguridad rojo, probablemente me lo pensaría dos veces antes de acercarme a un individuo con semejante ornamento en la cabeza. También tiene el aliciente de que puede cegar a los insensatos que se acerquen demasiado. Todo son ventajas. En caso de que alguien no se dé por aludido siempre podemos reforzar el distanciamiento con la ayuda de una cerbatana láser.
Ironías aparte, el trabajo de StupotMcDoodlepip es realmente interesante desde el punto de vista técnico y no deja de ser una ocurrencia divertida en unos tiempos en los que no está de más reírnos un poco al tiempo que aprendemos algo, aunque no vayamos a usarlo. [vía Digg]