
Lejos de los flashes de la gama alta, donde todas las marcas sacan pecho de sus buques insignia, es donde a los fabricantes de teléfonos les toca batirse el cobre realmente. Samsung tiene claro que su éxito no dependerá de lo bueno o no que salga su S21 Ultra, sino en llevar funciones atractivas a su gama media. Y hay que reconocer que su “serie A”, con el A52 5G a la cabeza, ha heredado más de alguna cosa interesante de sus hermanos mayores.
¿Será suficiente eso para hacerse un hueco importante en esta abarrotada sección? Aquí van nuestras impresiones después de haber probado el nuevo A52 durante unas semanas.
Siguiendo con la línea de sus últimos teléfonos, Samsung ha apostado por un diseño sobrio pero vistoso. Aunque los acabados sean en plástico, la parte trasera mate le da un toque más elegante, y al mismo tiempo evita que se llene todo de huellas. Siempre que puedan, digan sí a los acabados mate y olvídense de fundas feas y aparatosas.
Con un peso 189 gramos, el A52 se siente bastante ligero, pero no por eso llega a dar la impresión de teléfono “barato” cuando lo tenemos en la mano. Los acabados y la construcción en general del teléfono le dan un aire más premium de lo que nos tiene acostumbrada la gama media.
Gran parte de la culpa de esto último también lo tiene la pantalla SuperAMOLED que ha incluido Samsung en su teléfono. Con una resolución Full HD+, un brillo máximo de 800 nits y una tasa de refresco de 120 Hz, todo luce realmente bien en esta pantalla. Los coreanos llevan años fabricando grandes paneles y es todo un acierto que también se convierta en un pilar fundamental en sus smartphones de gama media.

Otro de los puntos fuertes del teléfono es su batería. Ya lo comentamos con el S21 Ultra: Samsung está tocando las piezas correctas con su gestión de la batería, porque cada vez es más fácil exprimirle horas extra al teléfono. Pese a contar con una batería de 4.500 mAh es bastante sencillo sacarle un día y medio de uso. Sin embargo, cuenta con dos pequeñas pegas que ensombrecen un poco este apartado.
La primera es que no cuenta con carga inalámbrica. Vale que no es algo que se le pueda exigir a un móvil en este rango de precios, pero estaría bien que se comenzase a normalizar esta característica como ya ha ocurrido con otras como el aumento en la tasa de refresco en las pantallas. La segunda —está bastante más grave— es que Samsung no incluye un cargador en la caja que aproveche la carga rápida de 25W del teléfono, sino que tan solo ofrece un cargador de 15W en su interior. Vale que al menos se ha dignado a incluir uno ahora que casi todos los fabricantes han decidido no hacerlo, pero ¿tanto costaría incluir un cargador acorde a la potencia del teléfono? Se trata de un detalle realmente molesto.
Siendo sinceros, en especificaciones el A52 tiene difícil ganar a algunos de sus rivales, pero tampoco se queda corto. Su procesador es un Snapdragon 750G que, sin ser el mejor de la clase, consigue cumplir con todas las tareas con fluidez, y que además no se queda tan atrás como podría parecer en el apartado gamer. Los 8GB de RAM y los 256 GB de almacenamiento que traen el modelo que estamos probando son unos buenos escuderos, pero tampoco nos dejarán con la boca abierta.

Sin embargo, Samsung ha decidido incluir algunos extras para terminar de inclinar la balanza hacia su lado. Para empezar, cuenta con dos grandes olvidados en los teléfonos de hoy en día: una tarjeta de expansión microSD (aunque es una ranura híbrida, por lo que si quieres usar dos tarjetas nanoSIM no podrás aprovecharla) y un jack de 3,5 mm. También ha añadido protección IP67 al agua y al polvo, una característica que no hemos visto antes en teléfonos de la gama media de Samsung y que se suele echar en falta cuando no se tiene. Gracias a ella tu teléfono aguantará hasta 30 minutos sumergido bajo el agua a un metro de profundidad, por lo que podrá sobrevivir a un chapuzón inesperado.
En lo que respecta al software, Samsung mantiene el nivel al que nos tiene acostumbrados estos últimos años. Antiguamente este apartado era un dolor de muelas para los coreanos, pero actualmente One UI 3.1 es una de las capas de personalización de Android más completas y trabajadas que hay.

El conjunto de cámaras del A52 tiene sus luces y sus sombras. En total, el teléfono de Samsung cuenta con 4 cámaras en su parte trasera: una cámara principal de 64 Mpx (con estabilización óptica), una cámara ultra gran angular de 12 Mpx, una cámara macro de 5MP y un sensor TOF de 5 Mpx (para eso del dichoso bokeh).
Empecemos por la lente macro, que como todas las cámaras macro en este tipo de móviles, carece de definición y enfoque suficientes como para sacar más de una o dos fotos pasables. Te olvidarás de ella a los cuatro días.
La cámara principal es harina de otro costal. Obviamente está lejos de los resultados que se consiguen con los teléfonos de la serie “S”, pero incluye estabilización óptica (OIS) y eso siempre es algo de agradecer, ya que mejorará el enfoque y la estabilización de tus fotos y vídeos. El rango dinámico y la definición que ofrecen sus 64 Mpx son más que buenos, aunque si no quieres fotografías sobresaturadas tendrás que tener puesto un ojo en el optimizador de escenas de Samsung que viene siempre activado por defecto.
La lente gran angular actúa como un buen complemento siempre y cuando tengas buena luz, pero en cuanto ésta falta, aparece rápidamente mucho ruido en las fotos.
La app de cámara de Samsung ofrece multitud de opciones diferentes de disparo y configuración, e incluso viene con unos filtros de Snapchat preconfigurados a los que podemos acceder desde una pestaña bautizada como “Diversión”.

Conclusión
No todo en el Galaxy A52 5G es perfecto. Sí, existen algunos móviles que le superan en prestaciones, y además tendrás que dejarte unos pocos euros más si quieres un cargador acorde a la potencia del teléfono, pero tiene varias cosas que ofrecer a su favor. Entre ellas, están una pantalla estupenda, una batería duradera, soporte asegurado para unos cuántos años y una cámara principal más que decente. Si además tienes algún elemento más del ecosistema de Samsung (Smart Tag, Galaxy Buds o Galaxy Tab) posiblemente sea tu mejor opción dentro de la gama media.