
El pique entre Elon Musk y Jeff Bezos ha alcanzado nuevas cotas de vergüenza ajena esta semana. En ambas direcciones.
El martes, Musk volvió a desbancar a Bezos en la lista de multimillonarios de la revista Forbes, lo que lo convierte nuevamente en el hombre más rico del planeta. El patrimonio del empresario tiene ahora un valor estimado de 201.000 millones de dólares gracias a un repunte de la acción de Tesla. Musk es la tercera persona en amasar una fortuna similar después de Jeff Bezos, fundador de Amazon y Blue Origin, y Bernard Arnault, CEO de Louis Vuitton.
El tema es que Musk se acordó de Bezos a la hora de celebrar su primer puesto. En un email enviado a Forbes, el director ejecutivo de Tesla y SpaceX escribió:
Voy a enviar una estatua gigante del número “2” a Jeffrey B., junto con una medalla de plata.
Elon es conocido por sus comentarios mordaces (y muchas veces desafortunados) sobre otras personalidades y empresas, pero a Jeff Bezos le tiene un “cariño” especial. Lo llamó copión cuando Blue Origin anunció su propia constelación de satélites, e hizo un chiste sobre que no se le levantaba (el cohete hasta la órbita terrestre) cuando Blue Origin presentó una protesta al gobierno de Estados Unidos por dejar que la NASA eligiera en exclusiva a SpaceX para desarrollar el aterrizador lunar de las misiones Artemisa.
Más tarde, Blue Origin contrató a los abogados de Amazon y presentó una demanda contra la NASA que paralizó el desarrollo del programa, lo que ha hecho que Elon Musk se muestre particularmente agresivo contra Bezos.
A la hora de la verdad, esa estrategia de patio de colegio parece estar funcionando. La imagen pública de Blue Origin se ha deteriorado hasta tal punto que la compañía ha elaborado un PDF de 13 páginas para demostrar que SpaceX también tiene un largo historial de litigios contra el gobierno de Estados Unidos. “Es difícil conciliar ese registro histórico con su posición reciente sobre otros que presentan acciones similares”, argumentó Blue Origin.
Musk no tardó en contestar que SpaceX demandaba “para poder competir, no para parar la competición”. Y en una entrevista reciente añadió: “No puedes llegar a la luna con juicios, sin importar lo buenos que sean tus abogados”.