Ahora la web charliebitme.com está anunciando que el vídeo de 56 segundos se subastará como un NFT cuando se cumplan 14 años de su publicación, el próximo 22 de mayo. El comprador del NFT poseerá, de alguna manera, la totalidad del vídeo y tendrá la oportunidad de grabar su propia parodia con Harry y Charlie. Además, el vídeo será eliminado de YouTube para siempre. El original, se entiende, ya que un NFT no impide que se sigan creando copias.

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Un NFT utiliza la misma tecnología de cadena de bloques que las criptomonedas, con la diferencia de que cada token es único. Tener un bitcoin es lo mismo que tener cualquier otro bitcoin, pero solo hay un poseedor de un determinado NFT. Esto permite a ilustradores, músicos y cualquier artista, en general, subastar archivos digitales como una imagen, un vídeo o un GIF animado. Aunque ese archivo se pueda copiar infinitas veces, solo hay uno asociado al token original. De este modo, solo habrá un comprador de ‘Charlie bit my finger!’, que luego podrá revenderlo y transferir su propiedad.

Otros virales que se vendieron como NFT