
Cuando leí la crítica de nuestro compañero Germain Lussier a Star Wars: The Rise of Skywalker no pude evitar fruncir el ceño. Ocurrió lo mismo cuando vi un titular tras otro dándole con un palo al final de J.J. Abrams. No estaba de acuerdo. Entendía el porqué muchos habían llegado a esas conclusiones, pero yo me sentía totalmente diferente.
Vi la película en el estreno de prensa el martes, y sonreí, me reí, me emocioné y me quedé boquiabierta. Se me aceleró el corazón cuando llegaba el final y no sabía lo que iba a pasar. Y alguna que otra lágrima se me escapó en ciertas escenas. Al salir del cine, lo único en lo que podía pensar es, “Tengo que verla otra vez”.
Por lo tanto, como han comentan mis queridos compañeros de Gizmodo en Español, he decidido sacar mi espada láser y ser parte de la resistencia cinemática. Durante estos últimos días, es probable que hayan leído o escuchado que The Rise of Skywalker es un decepcionante final a la saga. Yo les voy a dar nueve razones sin spoilers por las que me encantó. Que a fin de cuentas, se trata del Episodio IX.
1. El regreso del Emperador Palpatine
Entiendo a las personas que dicen que no les gusta que hayan traído de vuelta al Emperador. Sin embargo, para mí ha sido lo más normal del mundo. No puedo concebir un villano más malo que Palpatine, o uno que hubiera encajado tanto en la serie. En cierta forma, me recuerda un poco a la estructura de Harry Potter, dado que la mayoría creía que Lord Voldemort estaba muerto, pero volvió a hacer maldades de nuevo. En ese caso, como en este, el villano no pudo haber sido otro. Además, ¿qué villano se muere la primera vez que intentan matarlo?
El actor Ian McDiarmid, como siempre, no decepciona, y te dejará con los ojos del tamaño de platos al ver sus maldades. (En mi caso, me puse las manos sobre la boca para no decir “oh my God” en voz alta).
2. La química entre Rey y Kylo Ren
Este es uno de los pocos puntos en los que el compañero Germain y yo estamos de acuerdo. Rey (Daisy Ridley) y Kylo Ren (Adam Driver) son espectaculares juntos. Me emocioné mucho cada vez que salían los dos en la pantalla, y nunca decepcionaron. En esta última entrega, nos enteremos un poco más sobre su conexión y relación, la cual ha cambiado mucho con cada película.
No olvidemos que esto empezó con Kylo casi escupiendo, “Tú. Una chatarrera” cuando interrogaba a Rey en The Force Awakens pero que ha ido evolucionando a “No estás sola” en The Last Jedi. Además, Abrams y su equipo hacen que ambos se enfrenten a desafíos personales muy grandes juntos, lo cual emocionará a cualquier fan de los personajes.
3. La actuación de Adam Driver y el desarrollo del personaje de Kylo Ren
A mí siempre me ha gustado Kylo Ren, y siento que Adam Driver ha hecho un trabajo impecable en su interpretación. Me gustó mucho que Abrams dejara que el actor se luciera y que haya seguido desarrollando la complejidad del personaje. En las últimas dos películas, Kylo Ren ha sido un personaje que siempre me sorprendía. Nunca sabía muy bien lo que iba a hacer, y eso añadía a la intriga. Abrams sigue esta línea, mostrando el conflicto dentro de Ren, y te dejará en suspenso cada vez que veas al personaje.
4. Las pequeñas sorpresas de la película
No puedo comentar tanto sobre este punto por los spoilers, pero sí puedo decir que la película da muchas pequeñas sorpresas que te dejarán sonriendo. Por ejemplo, hubo un momento en los que todos en la sala contuvieron la respiración de pura sorpresa y deleite. Algunas de las mejores escenas son las de Poe Dameron (Oscar Isaac), ya que desarrollan más el personaje y nos dejan ver cómo reacciona en situaciones diferentes.
5. La General Leia Organa y Luke Skywalker
No sabía muy bien cómo iban a quedar las escenas de la General Leia (Carrie Fisher), dado el fallecimiento de la actriz, o las de Mark Hamill (Luke Skywalker) considerando lo que pasó en The Last Jedi. Sin embargo, las escenas de Leia quedaron muy bien: Abrams logró mantenerla como un pilar de la saga. De hecho, muchas veces me preguntaba si mis ojos me engañaban por cómo fluían todas sus escenas. Además, hay una escena específica con Leia que me quitó el aliento. Fue poderosa, emotiva y significativa.
En el caso de Hamill, y sin entrar en detalles de cómo participa Luke en esta entrega, no sabía muy bien cómo reaccionaría al verle de nuevo. Pero sus escenas tienen sentido, y Hamill nunca decepciona. No tengo ni una duda de que él tenía que estar para el final.
6. Una nueva aventura
Las aventuras son una de mis cosas favoritas de Star Wars. Me encanta poder ver una película y saber que durante aproximadamente dos horas, acompañaré a los héroes en una aventura increíble llena de personajes y mundos que nunca hubiera imaginado. The Rise of Skywalker te lleva en una aventura desde el primer momento, y te muestra varios sitios nuevos de esa galaxia muy, muy lejana.
7. La música
Los que me conocen saben que a menudo digo, “Maldito John Williams”. No lo digo como una falta de respeto, todo lo contrario. La música de Williams lleva a las películas de Star Wars a otro nivel. Williams se ha lucido de nuevo con The Rise of Skywalker, dándole giros a temas clásicos y creando tensión en momentos clave. Estoy segura de que Williams tiene parte de la culpa por hacer que se me escaparan algunas lágrimas en la sala.
8. Los Jedi, los Sith y la Fuerza
Siempre me han fascinado los Jedi, los Sith y la Fuerza. He echado mucho de menos que no se hayan mencionado tanto a las Órdenes de los Jedi y los Sith en The Force Awakens y The Last Jedi (aunque sí se mencionaron más los Jedi en esta última). En The Rise of Skywalker, Abrams incluye a las Órdenes y a sus seguidores como parte importante de la historia, lo cual fue muy bienvenido. Además, también aprendemos más sobre lo que puede hacer la Fuerza. Esto último me encanta, ya que nunca se ha comentado de forma exhaustiva las capacidades y limitaciones de la Fuerza, algo que me parece importante considerando el rol que tiene en toda la saga.
9. Los mensajes que manda la película
Por último, algo que siempre me ha encantado de Star Wars ha sido los mensajes que mandan las películas. No les puedo decir cuántas veces he repetido las palabras de Leia, repetidas por la Almirante Holdo en The Last Jedi, “La esperanza es como el sol, si solo crees en él cuando lo puedes ver, nunca pasarás la noche”. Por supuesto, cuando hablo de mensajes, no solo me refiero a frases, sino a los mensajes en general. No puedo decir más sin revelar algo por accidente, pero puedo afirmar que me encantaron, y que la película me dejó con varias lecciones que considero muy valiosas.
En conclusión, aunque respeto las críticas negativas sobre The Rise of Skywalker, y en ciertos casos las entiendo, creo que la película tiene muchísimas cosas increíbles que les encantarán a los fans. Además, soy de la opinión de que Abrams y su equipo se esforzaron muchísimo para hacer un final digno de la historia y merecedor de todo el cariño de sus muchos seguidores. Eso no es fácil, y por eso merecen nuestro respeto.
También hay algo más importante que creo que muchos olvidan cuando examinan una película como The Rise of Skywalker con una lupa, y es cómo la película nos hace sentir. Como he comentado anteriormente, yo sentí alegría, anticipación, tristeza y suspenso. Me lo pasé genial en el cine, porque estaba acompañando a algunos de mis personajes favoritos en su gran aventura final. No fue perfecta, claro que no. Hubo fallos, claro que sí. Pero me entretuvo durante cada segundo, y cuando salí del cine, me sentía bien, me sentía inspirada, me sentía ilusionada.
Y creo que las historias que te hacen sentir así son increíbles.
The Rise of Skywalker se estrena el 20 de diciembre.