Twitter anunció el cierre de Vine en octubre y hasta Pornhub se ofreció a comprar la plataforma para salvarla, pero su destino ya estaba escrito. Vine cerrará hoy definitivamente para convertirse en una simple cámara con la que podrás grabar vídeos en bucle de seis segundos y subirlos a Twitter.
Twitter compró Vine por unos 30 millones de dólares en octubre de 2012. La aplicación acabaría lanzando al estrellato a una nueva generación de creadores de contenidos que cambiaría la cultura de Internet para siempre.
En los últimos años, esos usuarios terminaron mudándose a servicios como Instagram y Snapchat, dejando un Vine desangelado y falto de crecimiento. Sin embargo, muchos de esos creadores de contenidos se han acordado de volver hoy a Vine para despedirse de la app que cambió sus vidas:
Sus vídeos no se van a perder, serán archivados y seguirán disponibles a través de la web. Todavía estás a tiempo de echar un vistazo a los 100 mejores vines de la historia.