¿Les suena familiar?

Sí, la idea de Google Maps era que los usuarios pudieran ver en el mapa la ubicación de los pokémon en el mundo real y así atraparlos usando la pantalla de su móvil para verlos en realidad aumentada. Sí, exactamente igual a la base de Pokémon Go.

Google Maps quería así, supuestamente, “conseguir al mejor maestro pokémon en el mundo” que incluso comenzaría a trabajar en sus oficinas.

Y la broma llamó la atención de John Hanke, quien en ese entonces era parte de Google pero hoy en día es el director ejecutivo (CEO) de una compañía llamada Niantic Labs, que ha sido la encargada de desarrollar juegos como Ingress y, además, el nuevo Pokémon Go.

Tomando su experiencia desarrollando un juego basado en la ubicación, y después de llegar a un acuerdo con los propietarios de la franquicia (Nintendo), el juego nació, basándose en una inocentada de Google pero finalmente haciéndose realidad.

Hoy en día es increíble el nivel de éxito que tiene Pokémon Go, y eso que ha pasado muy poco tiempo desde su lanzamiento. La aplicación incluso tiene más usuarios que Tinder, y se prepara a convertirse en otra fuente de ingresos para Nintendo. Todo esto en parte gracias a una broma. [vía Bloomberg]

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