Uno de los tantos problemas actuales de los viajes interestelares tiene que ver con la comunicación. ¿Cómo podremos comunicarnos con aquellos que se encuentren en otros sistemas estelares?. Un astrofísico asegura que la respuesta se encuentra en la gravedad del Sol.
Un estudio, publicado por el astrofísico Michael Hippke, propone utilizar la gravedad solar para amplificar las señales enviadas desde a una sonda, nave o colonia ubicada en otro sistema. Hippke asegura que de esta forma “incluso se podría ver vídeo en streaming desde Alfa Centauri”, la estrella más cercana al Sistema Solar.
Para recibir una señal mínima enviada por una sonda espacial ubicada en Alfa Centauri haría falta un instrumento del tamaño de la ciudad de Nueva York, según Hippke. Lo que propone el astrofísico se basa en uno de los efectos observados por Albert Einstein a finales de la década de 1910: el lente gravitatorio. Gracias a ello sería posible magnificar la señal aprovechando la magnitud y gravedad de nuestra estrella, el Sol.
Eso sí, para poder lograrlo el telescopio que recibe la señal tendría que estar ubicada a unos 90.000 millones de kilómetros del Sol, lo que supone otro problema para los físicos y astrónomos debido a que el hombre hasta la fecha lo más lejos que ha podido enviar un objeto en el espacio ha sido a poco más de 20.000 millones de kilómetros, con la misión de la sonda Voyager, la cual fue lanzada hace 40 años.
El telescopio propuesto por Hippke tendría que encontrarse a más de 4 veces la distancia actual de la Voyager. No obstante, algunos astrónomos creen que aprovechando la gravedad del Sol mediante un efecto “honda” se podrían acelerar mucho más los viajes de las sondas espaciales, tanto así que una sonda podría alcanzar los 90.000 millones de kilómetros necesarios para esta propuesta en menos de 30 años.
Una vez el telescopio se encontrara en la distancia correcta (o superior, hasta unos 300.000 kilómetros), podría recibir los mensajes de Alfa Centauri amplificados por el efecto de lente gravitatorio. En el futuro este sistema podría ser la clave para comunicarnos con colonias interestelares, o con las sondas que enviemos a otras estrellas. [vía New Scientist]