
¿Hay alguna explosión más potente que la de una supernova? Sí, la respuesta es un raro tipo de fenómenos cósmicos llamados Hipernovas. Un equipo de investigadores cree haber encontrado los restos de un tipo de hipernova completamente nuevo en una estrella con una composición poco común.
Las hipernovas son un tipo de suprnva que tiene lugar cuando una estrella especialmente masiva (más de 25 masas solares) explota en supernova, pero su masa es tan grande que inmediatamente colapsa en agujero negro, emitiendo dos chorros de plasma de alta energía y brotes de rayos gamma. La primera de estas masivas explosiones que son hasta 10 veces más potentes que una supernova normal se detectó en 1998, pero no se pudo observar el brote posterior debido a que el gas de la propia supernova lo ocultó. Desde entonces, los astrónomos han estado examinando minuciosamente el cielo en busca de más hipernovas. No es una búsqueda fácil porque el tipo de estrellas que terminan de este modo ya es raro. Se calcula que en nuestra propia galaxia solo tiene lugar una hipernova alrededor de cada 200 millones de años.
El Doctor Chiaki Kobayashi y su equipo de la Universidad de Hertfordshire junto a científicos de la Universidad de Australia creen haber encontrado un nuevo y raro tipo de hipernova a la que han bautizado provisionalmente como hipernova magneto-rotacional. El hallazgo se ha producido tras examinar 26.000 estrellas del proyecto SkyMapper. Entre esas estrellas ha aparecido una cuya composición desafía lo que sabemos sobre remanentes estelares.
La estrella se llama SMSS J200322.54-114203.3m y llamó la atención de los astrónomos por su composición. El análisis espectroscópico y de su rotación revela que, para empezar, tiene poquísimo hierro con una concentración 3.000 veces menor que la de nuestro Sol. También es pobre en nitrógeno. Sin embargo, tiene altísimas concentraciones de uranio y zinc. Por separado, esos detalles de composición podrían explicarse con fenómenos como una supernova o una fusión de estrellas de neutrones, pero juntos solo tienen una explicación posible. En algún momento de su pasado lejano SMSS J200322.54-114203.3 explotó con una fuerza que solo se ha visto en una de cada mil supernovas. Se cree que en origen era una estrella con 25 veces más masa que la de nuestro sol y un potente campo magnético que la hacía girar a altísimas velocidades. La estrella explotó y dejó tras de sí un agujero negro que hoy es difícil de detectar.
La hipótesis de una hipernova es la única que encaja completamente con la composición de esta estrella. Si se logra confirmar su existencia, el fenómeno podría aportar nuevas claves sobre cómo se forman los metales pesados en el universo. [Nature vía IFL Science]