
Tras la proliferación sin control de las iguanas verdes en Florida, la agencia estatal de vida silvestre está pidiendo a la población que se encargue de exterminar a este lagarto invasor, sin ningún tipo de permisos ni control.
La Comisión de Conservación de Vida Silvestre y Pesca de Florida (FWC, por sus siglas en inglés) ha pedido a los residentes que maten a cualquier animal que vean en sus propiedades, así como en 22 zonas públicas.
La población de estos resistentes animales está experimentando un aumento repentino en Florida, que ha sido favorecido por el cambio climático y los cambios en la vegetación local. Se han convertido en un gran problema para los residentes, ya que causan daños en los rompeolas, las aceras y los jardines. También pueden portar y propagar enfermedades.
“Los propietarios no necesitan de ningún tipo de permiso para matar a las iguanas en sus propiedades, y la FWC alienta a los propietarios a matar a estas iguanas siempre que sea posible”, señaló la agencia en una declaración.
No ofrecieron ningún tipo de sugerencia sobre cómo se suponía que debían matar a estos lagartos, y es que a pesar de que las iguanas verdes no sean una especie protegida, están amparadas por leyes contra la crueldad animal. Dicho esto, los funcionarios de Florida han estado exterminándolas aplastando sus cráneos a golpes o usando armas eléctricas similares a las que emplean en la industria ganadera.
Puede que algunos residentes no se sientan muy cómodos al tener que realizar esta tarea por ellos mismos, sobre todo si tienen que hacer uso de un bate de béisbol sobre la cabeza de un animal. En ese caso , los residentes “que atrapen a iguanas en su propiedad pueden recurrir a servicios de eutanasia por parte de veterinarios locales u oficinas de control de animales, según su ubicación y disponibilidads”, escribió la FWC.

Las iguanas verdes se encuentran normalmente en América Central, en algunas islas del Caribe oriental y en las partes tropicales de América del Sur. Estos lagartos fueron introducidos en Florida en la década de 1960, y ahora se pueden ver en la mayor parte del estado.
Las iguanas verdes macho crecen aproximadamente hasta alcanzar 1,5 metros de longitud y llegan a pesar alrededor de 7,7 kg. Las hembras crecen a longitudes similares, pero no pesan más de 3,2 kg. Estos lagartos viven en el suelo, en los arbustos y en los árboles, y pueden nadar tanto en agua dulce como salada. Estas iguanas no han tenido grandes dificultades para adaptarse a los entornos urbanos, donde pueden causar daños graves.

“Las hembras excavan en el suelo cámaras para sus huevos que pueden llegar a tener más de 27 metros de túneles interconectados y pueden poner entre 14 y 76 huevos”, señaló el FWC. “Las iguanas verdes pueden vivir hasta 10 años en libertad y 19 años en cautiverio”.
La iguana verde no es la única especie que actualmente crean problemas en Florida. La pitón birmana ha encontrado acomodo en los Everglades, donde consume una gran variedad de presas sin control.