Un virus que en ocasiones puede causar una parálisis similar a la poliomielitis en niños está aflorando después de haber desaparecido casi por completo durante la pandemia de covid-19. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos han detectado un aumento de casos relacionados con el enterovirus D-68. Los expertos creen que un pequeño porcentaje de estos casos desarrollarán una afección neurológica grave conocida como mielitis flácida aguda.
Durante el fin de semana, los CDC emitieron una alerta sanitaria sobre el EV-D68. Desde agosto de 2022, médicos y hospitales de varias partes de Estados Unidos han notificado a la agencia un repunte de casos de enfermedades respiratorias graves y hospitalizaciones entre niños causadas por dos grupos de virus: los rinovirus y enterovirus. Otras pruebas adicionales han demostrado que algunos de estos casos fueron causados por el enterovirus EV-D68, y los propios datos de vigilancia de los CDC han mostrado una mayor proporción de enfermedades respiratorias relacionadas con el virus este verano en comparación con los últimos tres años.
El EV-D68 es uno de los muchos virus que generalmente causan un resfriado común leve, sobre todo en niños. Sin embargo, en los últimos años se ha hecho evidente que esta infección a veces puede desencadenar mielitis flácida aguda. Este virus es un primo del virus de la polio, que se sabe desde hace mucho que causa una parálisis similar en aproximadamente el 0,1% de sus víctimas. Y se sospecha que el EV-D68 ha mutado recientemente de forma que es ahora más similar a la poliomielitis y, por lo tanto, es más probable que cause mielitis flácida aguda, aunque todavía sigue siendo un efecto adverso raro.
Los síntomas principales de la mielitis flácida aguda son debilidad repentina en las extremidades, debilidad facial, dificultad para hablar y dolor en la espalda y las extremidades. En los casos más graves, las personas pueden desarrollar una parálisis potencialmente mortal que provoca insuficiencia respiratoria, mientras que otras pueden desarrollar una parálisis permanente.
Probablemente haya varias causas para la mielitis flácida aguda, incluidos otros enterovirus, pero el aumento en los casos observados desde 2014 está estrechamente relacionado con los brotes de EV-D68. Estos brotes de EV-D68 y de mielitis flácida aguada ocurrieron cada dos años según lo observado durante la última década, probablemente como resultado de que la inmunidad de la población cayó lo suficiente como para que grandes grupos de niños se contagiaran a la vez. Pero este patrón, que habría pronosticado otro importante brote de mielitis flácida aguada en 2020, cambió con la llegada de la pandemia de covid-19.
Si bien una gran parte de la población ya ha contraído covid-19, una gran parte del mundo tomó precauciones durante los primeros años de la pandemia para evitar contactos sociales y físicos innecesarios. Es posible que estos esfuerzos solo hayan frenado levemente la propagación del coronavirus, pero fueron más efectivos para frenar la transmisión de muchas otras infecciones menos contagiosas, como por ejemplo el EV-D68. Pero recientemente muchos de esos gérmenes han sufrido un repunte, sobre todo los que son estacionales.
Ha habido casi 700 casos confirmados de mielitis flácida aguda documentados por los CDC desde 2014, que fue cuando la agencia comenzó a rastrear el virus formalmente. Durante los brotes de estos últimos años, hubo entre 150 y 200 casos de mielitis flácida aguda. Hasta el momento, solo se han reportado 13 casos en 2022, pero la afección generalmente aparece semanas después de los síntomas iniciales de un resfriado común, y los brotes anteriores de mielitis flácida aguda han seguido de manera similar a los brotes de EV-D68. En su advertencia, los CDC piden a los médicos que estén atentos a esta afección y señalan que “será esencial una mayor vigilancia contra la mielitis flácida aguda en las próximas semanas”.
El virus de la polio actual ha vuelto y con fuerza a Estados Unidos, hasta el punto que el Estado de Nueva York ha tenido que decretar el estado de emergencia por la propagación del virus. El aumento del movimiento antivacunas está haciendo que aumenten exponencialmente los casos y que repunte una enfermedad que estaba cerca de ser erradicada debido a la efectividad de las vacunas existentes.