El desayuno es una de las comidas más controvertidas en nuestra sociedad hoy en día, principalmente porque nadie está completamente de acuerdo sobre qué constituye el desayuno ideal. Sin embargo, aunque seas un amante de la comida, hay algunos desayunos que te dejarán boquiabierta.
¿Podrías comerte al ayudante de Papá Noel para el desayuno? ¿Te apetecen deliciosos hongos? ¿Qué tal judías cuyo olor está entre calcetines viejos y queso?
Si tu respuesta ha sido “sí” a todo aquello, no estás solo en este mundo. Hay otros que toman estos desayunos poco usuales y poco conocidos por el público en general. Te presentamos una selección de los desayunos más raros del mundo.
Alaska: Carne de reno
En Alaska, los renos no solo ayudan a Papá Noel, también son una parte típica del desayuno. Salchicha de reno es para Alaska lo que los panqueques son para la mayoría de Estados Unidos. Se suele comer con huevos, pan y tostadas. Según los testimonios, la salchicha de reno no tiene un sabor particularmente distinguible de otros tipos de salchicha. Para los que nos vivimos en Alaska, quizá deberíamos probar cuando no vemos renos por todos lados (en otras palabras, no en Navidades.)
México: Omelette con Huitlacoche
El Huitlacoche es un tipo de maíz negro que tiene un sabor ahumado y de tierra, el cual se puede comparar con el sabor de “champiñones mezclados con maíz”. El omelette con Huitlacoche es un plato se considera una delicia en México y es uno de los desayunos tradicionales. ¿Qué es? Maíz infectado con hongos.
Huitlacoche es una comida que se remonta a los aztecas. Maíz era una parte integral de la dieta azteca y se solía usar Huitlacoche para hacer tamales y caldos. Según Food Republic, Huitlacoche tiene más proteína que maíz normal y también contiene aminoácidos no encontrados en otros tipos de maíz. Se suele poner en omelettes, quesadillas y huevos poché.
China: Huevos del siglo
No, no te lo estás imaginando. Estos huevos están negros y la gente se los come. En China, los huevos de siglo forman parte del desayuno típico. Aunque su nombre hace referencias a un siglo, no son realmente tan viejos. El más viejo es un huevo de cinco meses.
Para confeccionar los huevos de siglo, se prepara un caldo de té, lima, sal y cenizas y se deja enfriar toda la noche. Después de esto, se agregan huevos de pato, codorniz o gallina al caldo, donde se quedan remojando por un periodo de tiempo, desde siete semanas a cinco años. El olor cuando se sirven es interesante. Algunos lo han descrito como el olor de orina de caballo. Sorprendentemente, el sabor se describe como “cremoso, suave y suculento”.
Texas: Tacos de desayuno
Lo siguiente no es algo necesariamente raro (en mi opinión, pero yo no soy la más objetiva), pero lo incluyo porque sí sorprendió a mis compañeros. En Texas, mi estado natal, uno de los desayunos típicos es tacos. Sí, tacos.
La elaboración y los ingredientes son simples. Ingredientes típicos incluyen tocino, huevo, patata, chorizo y queso en una tortilla de maíz o de harina. Si te atreves (y todos nos atrevemos), puedes agregar salsa roja o verde. No hay falta de lugares en donde comprar uno de estos tacos de desayuno. Se venden en restaurantes, gasolineras y en las food trucks de la calle. Larga vida los tacos de desayuno.
Tailandia: Chok
En Tailandia, se valora muchísimo la carne por las mañanas. Uno de las típicas comidas por la mañana es un plato llamado Chok, también conocido como Congee, pero pronunciado Joke. Se puede hacer con varios diferentes ingredientes, pero una mezcla típica para desayunar consiste de albóndigas de cerdo, fideos y gachas de arroz. También se puede agregar hígado.
Como muchos de los platos que hemos mencionado, el Chok se puede comer para el desayuno o para cualquier comida del día. Se considera un alimento reconfortante en Tailandia.
Japón: Natto
A primera vista, judías de soja no se destacan en el desayuno tradicional de Japón, que también incluye pescado, sopa de miso y arroz. Pero es sospechoso cuando estas judías de soja, conocidas como Natta, huelen a un combinación de calcetines viejos y queso. La razón es porque son judías fermentadas, o judías transformadas en un carbohidrato con la ayuda de una bacteria.
Aunque no suene especialmente apetecible, las judías de soja tiene un valor nutricional alto. Contienen proteína, fibra y probióticos, que ayudan a reforzar el sistema inmunitario del cuerpo. Con respecto al sabor, no hay un consenso. Algunos lo describen como el sabor de judías con un toque de barbacoa. Otros dicen que se parece al foie gras crudo. ¿Te atreverías?
Holanda: Tostada con chispitas
Lo siguiente no es exactamente raro. Conocemos todos los ingredientes de este plato, pero sí es curioso. En Holanda, un desayuno sofistacado consiste de chispitas de chocolate en una tostada con mantequilla o mermelada. Hasta tiene su propio nombre: hagelslag. También es un desayuno dinámico. Hay muchos diferentes tipos de chispitas que puedes escoger para tu tostada que varían en sabor y tamaño.
Escocia: Haggis
Ahora viajamos a Escocia, donde se come el Haggis. Al contrario de lo que muchos piensan, no es el nombre de un animal.
Se puede decir que es una combinación de varias partes de un solo animal: el cordero. Para crear Haggis, los escoceses hierven y luego pican los pulmones, el corazón y el hígado del cordero. Después, mezclan todo y lo depositan en el estómago de un cordero, que se cose para evitar el derrame de la mezcla. A continuación, todo (la mezcla de intestinos y el estómago) se hierve por varias horas. El resultado es un tipo de morcilla.
Para desayunar, se suele comer el Haggis con huevos, tomates, tocino y más.
Pakistán: Siri Paya
Por fin, una sopa. Siri Paya es un desayuno típico en Pakistán. El lenguaje te proporciona algunas pistas de lo que contiene. Siri significa cabeza, mientras paya significa pies. Este plato se puede hacer con la cabeza y los pies de una vaca, un cordero o una cabra. Para hacerlo, se fríe el cerebro en diferentes especias y cebollas y luego se agregan los pies. Se sirve con cebolla frita, pimientos verdes, jengibre y limón.
Hawai: Loco Moco
Terminamos con el “Loco Moco” de Hawai. Varias personas se atribuyen el mérito de haber creado este desayuno. En realidad, el mérito pertenece a los jóvenes del club Lincoln Wreckers Athletic de los años 40. Querían un desayuno barato que les satisficiera el apetito y nominaron a un miembro del club, cuyo apodo era “Loco”, a preguntar por tal desayuno en un restaurante de la ciudad. Como pueden imaginar, le dijeron que sí.
El Loco Moco consiste de arroz blanco, una carne de hamburguesa, un huevo frito y salsa gravy. Se tiene que romper el huevo y mezclarlo con la carne, el arroz y la salsa. Se dice que es como “probar el paraiso”.
Al final del día, hay que recordar que nunca se debe juzgar por apariencia, olor o cantidad. Lo que parezca poco usual puede ser el desayuno de todo la vida de otra persona. Solo importa una cosa: que se disfrute la comida.