El paciente fue operado para extirparle la anguila de 20 centímetros. Curiosamente, la anguila también había sobrevivido a su aventura y se mantenía con vida cuando los cirujanos se la sacaron.

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Como decíamos, no se trata de un hecho aislado. El “remedio popular” se ha repetido en la zona en los últimos tiempos. En 2017, a un hombre se le extrajo una anguila de 50 centímetros de su estómago tratando de aliviar el estreñimiento. En junio de 2020, un hombre de cincuenta años también se insertó una anguila en el ano, una que también entró en su cavidad abdominal. Después de la lesión, las heces y pus entraron a la cavidad, lo que le provocó una infección grave.

En este último caso, la anguila no sobrevivió. [IFLScience]