La última actualización de Windows 8.1 ha supuesto un cambio discreto pero muy bienvenido. Puede decirse lo mismo de la recién llegada versión 8.1 para dispositivos móviles. No es espectacular, ni va a cambiar el mundo, pero convierte a Windows Phone en algo que no era antes: un sistema operativo muy completo.
¿Qué es?
Es el cerebro de las pantallas más pequeñas en el ecosistema unificado de Microsoft. Es la versión más reciente de un sistema operativo móvil que parecía condenado al ostracismo porque siempre le faltaba algo. Es el tercer intento de hacer de Windows Phone un sistema perfecto o, al menos, completo.
¿Por qué es importante?
Mientras Android y iOS se disputaban el primer puesto, Windows Phone ha estado intentando alcanzar con mucho esfuerzo al grupo de cabeza. No se trata, ni mucho menos, de una causa perdida. Windows Phone tiene el mérito de ofrecer un diseño fresco y diferente. Además, es el corazón de algunos dispositivos realmente interesantes.
Windows Phone 8.1 es importante porque es la oportunidad de Microsoft de poner finalmente a este software en la posición a la que aspira. Es el impulso que necesitaba para no ser solo un sistema operativo competente, sino también uno coherente que ofrece todo lo que un consumidor puede necesitar. Francamente, es posible que Windows Phone no tuviera muchas más oportunidades para enderezar el rumbo.
Diseño
A primera vista, Windows Phone 8.1 es idéntico a sus predecesores, algo que está muy bien. Nos gusten o no, el estilo y la firma de este sistema operativo siempre han sido sólidos. La apariencia visual es el extremo opuesto al skeumorfismo. Windows Phone es sencillo, sin bordes, árido a veces, pero no deja de ser una apuesta interesante y más agradable de utilizar de lo que muchos creen.
Sin embargo, no solo de baldosas vive el usuario. Windows Phone 8.1 viene con un nuevo centro de notificaciones, y es un estupendo lugar para empezar.
No hay mucho espacio para la sorpresa en una función como un centro de notificaciones. Los que ya conozcáis los centros de Android o iOS os sentiréis casi como en casa, especialmente los primeros. El diseño de este centro de notificaciones y su sistema de botones se le parece mucho. No será muy original, pero es funcional y familiar para el usuario, que es de lo que se trata.
El diseño de este nuevo centro es bueno, aunque se le puede echar en cara que no encaja mucho con el resto de la estética Windows Phone. Mantiene el color y estilo del resto del SO, pero las sutiles diferencias en los textos, el espaciado y las proporciones de los botones dan una cierta sensación de que se trata de un añadido un poco forzado.
Aparte del centro de notificaciones, Microsoft quiere dar un aire nuevo a la pantalla bloqueada del teléfono. Lo raro del asunto es que estos cambios no se han integrado en la actualización, sino que llegarán de mano de aplicaciones oficiales de la compañía. Aún no se ha precisado cuando estarán disponibles, pero aquí tenéis dos capturas de pantalla de muestra sobre su aspecto y funcionalidad.
Por supuesto, la actualización también nos trae a Cortana, el nuevo asistente personal de Microsoft que vendrá a competir con Siri y Google Now y que se activa desde el botón búsquedas. A Cortana le hemos dedicado un post aparte. Desde el punto de vista de diseño, baste decir que encaja como un guante en el resto del sistema operativo y que tanto sus animaciones como su estética resultan elegantes.
Probablemente, el mayor cambio de Windows Phone 8.1 es haber hecho algunas concesiones para que los usuarios que vienen de otros sistemas operativos (véase fundamentalmente Android y iOS) encuentren un software algo más familiar. Los mejores cambios están bajo la superficie, y resuelven algunos de los problemas que Windows Phone arrastraba desde hace tiempo.
Usando Windows Phone 8.1
La novedad más llamativa de Windows Phone 8.1 es Cortana, pero está muy lejos de ser la mejor novedad. Ese puesto se lo lleva de calle el centro de notificaciones.
Centro de notificaciones
Estaréis pensando que los centros de notificaciones son un tema aburrido, y es cierto. El de Windows Phone 8.1 no tiene nada de especial, y eso es lo bueno. Fuera por vocación de estilo o por simple falta de visión, la falta de un centro de notificaciones en Windows Phone era un error enorme.
Windows Phone tenía notificaciones, pero no había ningún lugar al que pudiéramos ir a revisarlas una vez desaparecían (aparte de a la propia aplicación, claro) y eso era bastante frustrante. Los Live Tiles están bien, pero un simple número al lado del icono de correo electrónico no es tan útil o informativo como una lista que puedes desplegar en cualquier momento. Windows Phone 8.1 conserva ambos sistemas.
El nuevo centro cuenta con una línea de accesos directos personalizable, un enlace a configuración, y una lista general de notificaciones. Un detalle que quizá se podía haber pulido es que los mensajes no se agrupan por conversaciones. En otras palabras, si mantenemos una conversación en Twitter especialmente intensa, se nos muestran todas las respuestas, y eso come todo el espacio, lo que nos obliga a hacer scroll para ver el resto. No es un fallo garrafal, pero puede resultar molesto a veces.
En días de trabajo intensos, solo los correos, sus respuestas y las respuestas a respuestas devorarán el espacio del centro de notificaciones. Se pueden eliminar todas las notificaciones de una aplicación, pero sigue siendo un detalle simple que deberían haber pulido.
Cortana
El nuevo asistente de voz de Windows Phone intenta hacer suyo lo mejor de Siri y Google Now. Por un lado tiene personalidad, pero también intenta resultar útil más allá del parloteo, mostrando información que cree que puede sernos útil antes de que la pidamos.
Probablemente Cortana no es tan omnisciente como Google Now cuando utilizamos todo el ecosistema Google con este último, pero no lo hace mal. Al iniciarse por primera vez, Cortana nos bombardea con una serie de preguntas sobre nuestras áreas de interés que más tarde utiliza para filtrar las noticias que sean más de nuestro gusto.
En lo que respecta a los controles por voz, Cortana no tiene nada que envidiar a Siri o Google Now.
Por supuesto, esto no quiere decir que Cortana no tenga algunos trucos propios. De hecho, tiene algunos muy buenos. El sistema de notas de voz parece mejor enfocado en cuanto a privacidad, y se pueden activar recordatorios en torno a una persona específica de nuestros contactos que saltarán la próxima vez que vayamos a llamar o a escribir a esa persona.
Aplicaciones
La idea de que la tienda de aplicaciones de Windows Phone es un desierto ya no es cierta. Es cierto que, durante mucho tiempo, la Windows Store ofrecía lo más básico, pero nada más. Ahora, aplicaciones como Instagram, Vine o Pocket añaden la sustancia que le hacía falta a este escaparate.
Lo que sigue faltando es la guinda del pastel, las aplicaciones que es posible que sean completamente idiotas o inútiles pero de las que todo el mundo está hablando, como Flappy Bird o Candy Crush. No son necesarias, por supuesto, pero dejan al usuario con una cierta sensación de estar fuera del mercado.
Todo lo demás
Si usas a menudo servicios de Microsoft, Windows Phone 8.1 te ofrece un refugio muy acogedor. OneDrive hace que compartir documentos entre el móvil y el PC sea un paseo incluso más fácil que iCloud o GoogleDrive. Si almacenas tus contactos en una cuenta de Outlook podrás compartir tu red WiFi automáticamente con ellos cuando vengan de visita. Si usas Skype, podrás hacer llamadas directamente desde Cortana. Al menos en teoría, porque ninguno de mis contactos tenía un número VoIP que Cortana considerase adecuado.
Hablando de números, Windows Phone 8.1 es enloquecedoramente literal. Una noche me encontré intentando enviar un mensaje de texto a uno de mis contactos. No fui capaz de encontrar una opción directa para hacerlo, ni siquiera comenzando a escribir su nombre. Tuve que acabar introduciendo el número manualmente.
Resulta que el número estaba guardado como Casa en vez de como Móvil en el repositorio de contactos de Google que importé al teléfono, y Windows Phone considera que no se pueden enviar mensajes de texto a una línea etiquetada como fija. Tampoco puedo enfadarme con Windows Phone. La única moraleja es que hay que mantener los contactos bien gestionados, pero no deja de ser una función un poco quisquillosa.
Esta inexplicable falta de atención de Microsoft por los detalles (o facilidad por tocar las narices, según se mire) sigue estando presente en algunas partes de Windows Phone 8.1. El navegador GPS, por ejemplo, nunca me ha guiado mal, y sus comandos de voz funcionan perfectamente con Cortana, pero no es capaz de mostrarme la líneas de tren si quiero ir en transporte público.
Nos gusta
Tal y como Windows 8.1 hacía un guiño a los usuarios tradicionales (la mayoría) con sus nuevas funciones para el ratón, Windows Phone 8.1 hace lo propio con el centro de notificaciones. Cortana no es revolucionaria, pero funciona tan bien como Siri o Google Now. La actualización también ofrece un montón de pequeñas mejoras. Puede que nunca usemos algunas de ellas, pero merece la pena citarlas:
- El que Cortana nos recuerde algo relativo a un determinado contacto cuando le vayamos a llamar o a escribir.
- El sistema de WiFi inteligente es maravilloso ya que incluso nos evita los pasos web habituales en muchas redes públicas. La opción de compartir nuestra red a visitas sin compartir la contraseña también está bien, aunque solo funciona si tienen Windows Phone.
- Las nuevas aplicaciones de pantalla bloqueada prometen.
- La opción de silenciar a Cortana durante un tiempo exceptuando determinados contactos es excelente.
- Cortana reconoce el lenguaje con mucha más naturalidad que Siri o Google Now, incluso con expresiones equivalentes que rozan el argot urbano.
Windows Phone 8.1 consigue algo que no conseguían anteriores versiones, que queramos usar el smartphone con ese sistema operativo.
No nos gusta
Aunque ha avanzado mucho, Windows Phone sigue teniendo pequeños fallos y funciones que no están pese a que todos sus competidores las han integrado ya hace tiempo. Ahora sí que podemos considerar que el sistema operativo móvil de Microsoft está a la altura de iOS o Android, pero con el tiempo que lleva en el mercado, no sabemos si felicitarle por ello, o no. A la postre, no sabemos si ponerse a la altura es suficiente para invitar a los usuarios de otros sistemas a que den el paso y hagan el cambio.
¿Me paso a Windows Phone 8.1?
No hay nada especial que haga que Windows 8.1 sea superior a otros sistemas operativos. Si estás especialmente contento con iOS o Android, el cambio no te hará más feliz.
Sin embargo, si eres un curioso de los sistemas operativos, y hay terminales Windows Phone que te llaman la atención (como los Lumia con cámara Pureview), Windows Phone 8.1 es la excusa que necesitas para cambiar. La nueva actualización añade las piezas que le faltaban a un sistema operativo que ahora sí es sólido, y sí está completo. Es, sin duda, una buena noticia para el futuro de Windows Phone y para que siga habiendo varias alternativas en el mundo de los ecosistemas móviles.
***
Psst! también puedes seguirnos en Twitter, Facebook o Google+ :)