Rodar la escena fue una pequeña odisea para Chris Hemsworth, que tuvo que someterse a un entrenamiento extra para poder asumir el reto físico de hacer todo lo que su personaje hace. No fue menos duro para Sam Hargrave, el director de Extraction se ató al capó de un automóvil a toda velocidad para poder rodar algunos planos de la persecución. El sistema debía permitirle bajarse rápidamente para continuar el rodaje a pie, meterse dentro del coche y hasta colgarse de una cuerda para poder grabar a Hemsworth en pleno salto.

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La experiencia ya la tenía. Extraction es la primera película de Hargrave. Hasta entonces era uno de los coordinadores de escenas peligrosas de Marvel. A juzgar por el vídeo de cómo se hizo, dirigir no ha hecho que pierda el gusto por la adrenalina. [Insider]