Solo su entrada es tan enorme que los geólogos no se explican cómo ha podido pasar desapercibida hasta ahora. Sin embargo, así ha sido. Un helicóptero que censaba las poblaciones de caribúes del Parque Nacional Wells Gray se topó con ella por casualidad. La llaman el Pozo del Sarlacc.
La entrada a la cueva es un pozo vertical que hace honor a su nombre. Mide 60 metros de ancho y casi cien de largo. El espeleólogo John Pollack acompañó a un equipo de científicos en una primera expedición a la cueva el pasado mes de septiembre e hizo la siguiente descripción del pozo a Canadian Geographic:
He visitado algunas de las cuevas más grandes del mundo y esta cosa tiene una entrada descomunal, y no solo para el estándar canadiense. Si te asomas al borde del pozo y miras hacia abajo tienes una línea de visión limpia de 183 metros. No vas a encontrar ese espacio diáfano en ninguna cueva de Canadá. Sencillamente no pasa. La escala de esta cueva es desproporcionada.
Lo raro del descubrimiento es que se ha hecho en un parque nacional, que a priori es una zona ya de sobra cartografiada y explorada... o no. El cambio climático parece tener algo que ver con el descubrimiento. Hasta hace 20 años, la región en la que ha aparecido la cueva estaba cubierta de nieves perpetuas. Eso y la configuración del valle hace que sea muy difícil acceder al lugar. Probablemente la cueva haya estado semioculta por la nieve y nadie se haya molestado en pasar por allí hasta ahora.
Los responsables del hallazgo aún no tienen claro si la cueva realmente es inexplorada., Desde luego no hay ningún registro científico al respecto del Pozo del Sarlacc. La geofísica Catherine Hickson y su equipo han pedido a las poblaciones de nativos americanos de la Columbia Británica o a cualquier otro que tuviera conocimiento de la cueva que compartan cuanta información pudieran tener sobre ella.
Tan solo se ha practicado un intento de descenso a la cueva, pero la cascada que cae por uno de sus laterales ha hecho imposible profundizar más allá de ochenta metros sin la ayuda de equipo especial. Los descubridores de la cueva han decidido mantener su ubicación en secreto para preservar posibles especies de animales o plantas que puedan ser únicas de ese ecosistema. Se espera que la primera expedición que explore la cueva por completo tendrá lugar en primavera de 2020.
La cascada que cae en el pozo es también la responsable de su formación. El agua proviene de un glaciar cercano y se cree que el caudal de 15 metros cúbicos de agua por segundo desemboca en un valle a dos kilómetros de distancia y 500 metros de desnivel. El complejo de cuevas por las que viaja el agua puede ser realmente grande. Lo más curioso es que el nombre provisional de Pozo de Sarlacc podría acabar siendo su denominación definitiva. La referencia a Star Wars se le ocurrió el biólogo Bevan Ernst, pero ya hay una petición en Change para que sea el definitivo. Si no aparece ningún registro en el que se la conozca por otro nombre, el nombre de la cueva podría ser oficial. [Canadian Geographic vía Science Alert]