Si frecuentas redes como Twitter o Facebook probablemente ya sepas de qué fotos estamos hablando. El pasado 14 de julio, el diario británico Daily Mail publicó en exclusiva unas fotos supuestamente filtradas desde el rodaje de la nueva película de Blancanieves y los Siete Enanitos. Esta es su historia real.
Las fotos (y un vídeo obtenido también por el Daily Mail) muestran a una mujer ataviada con el traje clásico de Blancanieves, acompañada por siete alegres personajes caminando por un prado lleno de flores. La cuestión es que los siete personajes no son enanos y muestran una diversidad de géneros y etnias, lo que no tardó en despertar las iras de los sectores más conservadores de Internet. El artículo que acompañaba a las fotos, titulado “Blancanieves y los siete compañeros políticamente correctos”, también hacía sangre en torno a ese detalle.
Cuando la mierda llegó al ventilador de las redes sociales, Disney se apresuró a emitir un comunicado asegurando que las fotos son falsas y que no tienen nada que ver con el rodaje del film. De hecho la compañía solicitó una rectificación al Daily Mail. Sin embargo, apenas unas horas más tarde, el departamento de relaciones públicas de Disney reconoció que las fotos sí que eran reales y pertenecían al rodaje (cuya preproducción está teniendo lugar en Bedfordshire, Reino Unido). La compañía explicó que no se trata de fotos oficiales, sino de pruebas de preproducción realizadas por actores figurantes.
Este tipo de pruebas son habituales en el cine y se realizan para probar detalles como los encuadres, la iluminación, o el color antes de comenzar el rodaje propiamente dicho. De hecho, las fotos no muestran a Rachel Zegler, que es la actriz elegida para interpretar a Blancanieves. Tampoco está Andrew Burnap, cuyo papel en el film aún no se conoce con exactitud, aunque se cree que interpretará al Príncipe.
No es la primera vez que el remake de Blancanieves está en el punto de mira. La elección de Rachel Zegler ya ha sido criticada antes, y hasta el actor Peter Dinklage puso en duda la necesidad de revisitar un clásico como este con actores reales. Todo indica que Disney va a molestar a alguien con esta película haga lo que haga.