No deberías dar mucho crédito a lo que lees en los análisis de las tiendas de aplicaciones como la iTunes App Store o Google Play. Pueden ser de cierta ayuda como referencia inicial, pero también están plagados de comentarios desinformados o tendenciosos. Hay mejores maneras de saber si una aplicación merece realmente la pena o no.
El problema de las puntuaciones
A menudo, la gente confía solo en la puntuación de una aplicación para determinar su calidad. En un mundo perfecto, esta cifra sería un indicador objetivo derivado de la opinión de personas con criterio que han probado la aplicación. ¿Cuántas variables crees que no se cumplen en la frase anterior?
El problema con los análisis de aplicaciones no se limita solo al esporádico paso de trolls y haters. Es un poco más grave que eso, y se puede resumir en los siguientes puntos:
- El sesgo de autoselección: En Estadística, un sesgo de selección es un error producido cuando el grupo de población que participa en un estudio se selecciona a si mismo para participar. Aplicado a las tiendas de aplicaciones, esto significa que los que comentan una aplicación generalmente tienen una buena razón para hacerlo, lo que ya de por sí complica el que tengan una visión objetiva de la misma.
- Falta de criterio útil: Pasando por alto los comentarios que están tan mal escritos que resultan abiertamente ilegibles, la mayor parte de los análisis de las tiendas de aplicaciones no son útiles sencillamente porque no aplican criterios útiles. Decir que una aplicación apesta no sirve de nada a otros usuarios si no se explica por qué apesta. Decir que la aplicación da errores en el Xperia Z1 o en el iPhone 4S no sirve de nada a los usuarios de otros teléfonos. Decir que tal o cual característica funciona mal tampoco es indicativo real de si la aplicación hace bien otras cosas. Si lo pensamos bien es lógico que sea así. Nadie se va a molestar en aplicar una metodología a su análisis a menos que tenga interés en ello, lo que nos llevaría, por otra parte, al punto uno.
- La actividad de las agencias: Tan viejo como el mundo y muy habitual. Las agencias de comunicación encargadas de promocionar una aplicación se encargan de llenar las tiendas de aplicaciones de análisis positivos. Si la aplicación acaba de salir y sólo tiene un comentario muy positivo, desconfía... Mejor desconfía en todos los casos.
- Juego sucio entre competidores: Esto no es tan habitual como el caso anterior, pero ocurre. Vender una aplicación es duro, y hay mucha competencia. No es la primera vez que un desarrollador recurre a amigos y familiares para que puntúen mal una aplicación rival. También sucede a la inversa, con comentarios positivos en la propia.
- Los cambios en la plataforma: Recientemente, Google Play introdujo un nuevo sistema de recomendación que permitía puntuar sugerencias de aplicaciones basadas en las que ya tenemos instaladas. La maniobra no se explicó bien. Lo que en realidad hacía era puntuar las aplicaciones en sí. El efecto fue desastroso para las puntuaciones. Este tipo de cambios en el modo de puntuar o en desde donde se puntúa la aplicación suceden a veces, y restan mucha credibilidad al sistema.
En suma, que en el mejor de los casos, las opiniones y análisis son tan específicos que solo sirven a un puñado de usuarios. En el peor, son opiniones interesadas a favor o en contra del producto. Lo ideal sería que las personas que escriben análisis aprendieran a hacerlo bien, pero eso exige esfuerzo, tiempo y cierta especialización a cambio de nada. Como decíamos arriba. El mundo en que vivimos no es ideal. Mientras tanto, lo mejor que podemos hacer es encontrar maneras alternativas para informarnos sobre una aplicación.
Informarse correctamente
¿En qué confiar entonces? No hay una web mágica dueña de la verdad inmutable, pero hay ciertas indicaciones que podemos seguir para informarnos correctamente.
- Leer análisis en blogs: No importa que smartphone tengas. Seguro que hay un blog para él, o para su sistema operativo. Leer dos o tres opiniones de personas especializadas en analizar software es la mejor manera de formarse una opinión. Ojo en todo caso a la fecha de publicación. No sea que estén hablando de una versión anterior.
- Buscar demos y análisis en YouTube: No importa lo descriptivo que sea un análisis en un blog. A veces nada es mejor que ver la aplicación en movimiento. Para ello basta con buscar el nombre del software en YouTube y ver algún vídeo. Así os podéis hacer una idea de cómo es de rápida funcionando, o qué aspecto tienen sus menús y cómo se manejan.
- Investiga al creador de la aplicación: Las tiendas de aplicaciones suelen permitir acceder a la lista de otras aplicaciones creadas por el mismo desarrollador. Echales un vistazo. Navega un rato por su página web y comprueba opiniones respecto a esas otras aplicaciones. Busca el nombre de la aplicación en Twitter o Facebook.
Pese a estos consejos, siempre habrá aplicaciones tan personales o específicas que es imposible saber si son lo que necesitas hasta que las pruebas. En estos casos, y si la aplicación es gratuita, nuestra mejor recomendación es que la instales y te formes tu propia opinión.