El incidente que hizo temblar el telescopio espacial Webb no causó ningún daño perceptible en el observatorio, concluyó una investigación dirigida por la NASA.
“Los equipos de ingeniería han completado pruebas adicionales que confirman que el telescopio espacial James Webb de la NASA está listo para volar”, explicó la NASA en un comunicado .
Eso es un gran alivio. Significa que los preparativos para el lanzamiento pueden continuar según lo planeado. El despegue está programado para el miércoles 22 de diciembre a las 7:20 am ET (12:20 p.m. UTC). El lanzamiento del telescopio espacial de próxima generación estaba programado originalmente para el 18 de diciembre, pero un aterrador incidente de montaje en la instalación de preparación de satélites de Kourou, en la Guayana Francesa, resultó en un retraso de cuatro días. El contratista privado Arianespace está gestionando el lanzamiento para la NASA.
El incidente ocurrió mientras los técnicos se preparaban para montar el telescopio en el adaptador del vehículo de lanzamiento, la estructura física que conecta el James Webb con la etapa superior del cohete Ariane 5. Mientras esto sucedía, una “liberación repentina y no planificada de una abrazadera, que asegura al Webb al adaptador del vehículo de lanzamiento, causó una vibración en todo el observatorio”, según la NASA.
El evento fue tan preocupante que la NASA decidió convocar a una junta de revisión de anomalías para determinar si el James Webb sufrió algún daño como resultado del temblor. Los equipos de ingeniería completaron sus pruebas el 24 de noviembre y no encontraron nada malo en el observatorio. Esto llevó a un “consentimiento para la sesión de combustible”. El abastecimiento de combustible del observatorio está programado para el 25 de noviembre, en un proceso que se espera que dure alrededor de 10 días.
El Telescopio Espacial Webb es un proyecto internacional en el que participan la NASA, la ESA y la Agencia Espacial Canadiense. Es el telescopio espacial más complejo y poderoso jamás construido, y realizará observaciones sin precedentes del sistema solar, la Vía Láctea y el universo. El proyecto se ha visto empañado por numerosos retrasos y sobrecostes, pero parece que el Webb finalmente está camino de hacer su tan anticipada salida de la Tierra, al menos hasta que suceda otro incidente.