
El puente de Dubingiai, sobre el lago Asveja, es uno de los puentes de madera más antiguos de Lituania. Recientemente un equipo de técnicos a acometido su restauración. Al examinar los postes que lo mantienen en pie, los operarios han encontrado una sorpresa inesperada: los restos de un soldado medieval con todo su equipo de batalla.
El cuerpo se hallaba enterrado bajo la arena y lodo del fondo, a 9 metros de profundidad, lo que ha permitido que tanto sus huesos como su equipo sobrevivieran todo este tiempo en un excelente estado de conservación. Entre las pertenencias del personaje, los buzos del Museo Nacional de Lituania han hallado unas botas y un cinturón de cuero con hebillas, una espada, y dos cuchillos con el mango de madera.
Los restos datan del siglo XVI o XVII y revelan que el personaje era algún tipo de soldado de la época. Tiene sentido si tenemos en cuenta que el puente era lugar de paso obligado hacia el cercano castillo de Dubingiai. Lo que es un absoluto misterio es cómo murió el soldado, a qué ejército pertenecía, o por qué su cuerpo terminó en ese lugar en vez de recibir sepultura. Para añadir más preguntas al hallazgo, los técnicos que reparan el puente han descubierto que el lugar en el que ha aparecido el cuerpo tenía un pilar más que sujetaba el puente en ese punto y que desapareció con el paso de los años.

Quizá fuera la víctima de algún tipo de escaramuza, o de algún desgraciado accidente, pero aún queda mucho trabajo antes de esclarecer ese misterio de hace 500 años. El cuerpo del soldado y su equipo han sido trasladados a las instalaciones del Museo para su estudio. El equipo de antropólogos y arqueólogos que lo examina calcula que aún tardará un año en revelar todos sus misterios. [Baltic News Service vía Science Alert]