Los hermanos Joe y Anthony Russo han sido los responsables de dirigir dos películas del Capitán América y dos de los Vengadores, incluyendo la nueva Avengers: Endgame. Responsables de algunas de las mejores películas de cómics en la historia, ahora explican por qué Superman es uno de los superhéroes más difíciles de adaptar en el cine.
En una entrevista con Business Insider, los Russo comentaron que, básicamente, mientras más poderoso es un superhéroe se hace más difícil lidiar con la narrativa del personaje, debido a ser inmunes a cualquier peligro común y en gran parte al daño físico. La única forma de hacerlo es encontrar una debilidad, algo que haga vulnerable al personaje, sea física u emocionalmente.
El mejor ejemplo de esto, para los Russo, es Superman. “Es un personaje muy difícil, debes encontrar algún fallo o debilidad emocional en esta clase de personajes para hacerlo vulnerable”, comenta, y de este modo poder crear alguna narrativa interesante, una historia con un arco argumental que tenga altos y bajos. Si sencillamente lo dejas ser indestructible, no tendrá ningún tipo de interés. Según los directores:
“Como cineastas y creadores de historias, debido a la forma en la que exploramos los personajes con los que trabajamos, siempre buscamos vulnerabilidades en ellos porque de este modo es que se vuelven interesantes. Sí, indudablemente gracias a su fuerza y poderes ya son interesantes, pero obtienen mucha profundidad cuando les quitas esa fuerza”.
Para muchos, el mayor fallo de Justice League es no haber dejado que Superman tuviese realmente un conflicto interno. El personaje solo exploró su lado oscuro durante unos pocos minutos, lo que evitó que tuviera que luchar consigo mismo y desarrollara un conflicto moral y emocional en la película. En un personaje tan poderoso como Kal-El, es esta clase de problemas y momentos lo que lo hacen más interesante. [vía Business Insider]