Se llaman fideos Suomian, y según los habitantes de la aldea china de Nanshan de la que son originarios, solo hay alrededor de 300 maestros artesanos que sepan como hacerlos correctamente. El proceso es tan complejo y fascinante que a ratos parece que están confeccionando tejido para ropa.
Los fideos Suomian se confeccionan sin la intervención de ningún tipo de maquinaria. Después de mezclar la masa, los artesanos la cortan en una única pieza y la alargan a mano hasta formar una cuerda larga. Esa es la parte fácil.
El auténtico reto comienza cuando hay que trenzar esa fina cuerda en unas largas varillas. Hay que retorcer la masa 60 veces y hacerlo con precisión, porque luego se va estirando paulatinamente y no debe romperse. Para más INRI, partir de este momento el resultado depende del clima. Si los días son demasiado húmedos, la masa se echará a perder y habrá que tirarla y empezar de nuevo. Si son demasiado secos se romperá y tampoco sirve.
Los artesanos como el protagonista del vídeo no miran las predicciones meteorológicas y solo se fían de su instinto para elegir el día adecuado en el que empezar a amasar. Una vez comiencen, la masa no se puede guardar y el proceso debe continuar. El último paso consiste en estirar los fideos al aire libre y terminarlos de estirar hasta que alcanzan su longitud final. Si ese día llueve, todo el trabajo se echará a perder.
El maestro artesano que hace los fideos Suomian en Nanshan lleva 40 años en esa labor, y asegura que aún seguirá haciéndolo otros 20 años más. Explica orgulloso que los habitantes de la aldea, cuando compran fideos, se los compran a él. Francamente no me extraña. El único problema del vídeo es que ahora tengo hambre. [More China 更中国 vía Sploid]