Tienes fiebre, mocos y no te puedes salir de la cama. Tiene que ser la gripe, ¿verdad? No necesariamente.
La gripe y el catarro común tienen muchas semejanzas, lo cual hace difícil que identifiques lo que te está haciendo sentir tan mal. Este año ha traído la peor temporada de gripe en años, así que la probabilidad de que contagies la gripe es mayor que en el pasado, especialmente si no recibiste una vacuna contra ello. (¿Por qué no te vacunaste? Hazlo ahora mismo.)
Aunque una prueba realizada por tu médico es la única forma segura de saber si tienes un simple resfriado o la gripe, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) publicó unas orientaciones generales esta semana que explican algunas de las diferencias entre las enfermedades. Así puedes hacer una conjetura bien fundamentada.
La clave, en cierto sentido, es cuánto tardes en enfermarte. Si empiezas a sentirte mal poco a poco, es probable que tengas un catarro. Por otro lado, si te sientes muy mal de repente, es mucho más probable que tengas la gripe.
Esto es lo que dicen los CDC. Al lado está lo síntomas que corresponden a cada enfermedad:
Gripe (Síntomas)
- Apariencia de síntomas (Rápido)
- Fiebre (Común)
- Dolores (Común)
- Escalofríos (Bastante común)
- Fatiga y debilidad (Común)
- Estornudos (A veces)
- Congestión (A veces)
- Dolor de garganta (A veces)
- Molestias en el pecho/tos (Común)
- Dolor de cabeza (Común)
Resfriado (Síntomas)
- Apariencia de síntomas (Gradual)
- Fiebre (Raro)
- Dolores (Un poco)
- Escalofríos (Poco común)
- Fatiga y debilidad (A veces)
- Estornudos (Común)
- Congestión (Común)
- Dolor de garganta (Común)
- Molestias en el pecho/tos (Leve o moderado)
- Dolor de cabeza (Raro)
A pesar de lo que tengas, toma muchos líquidos, échate la siesta y quédate en casa para que no le des un regalo no deseado a tus compañeros y amigos. Lo apreciarán.