Comenzamos la semana con la tristeza de tener que despedir a uno de los mitos más enormes de la música y la cultura pop de las últimas décadas. El cantante y actor David Bowie ha fallecido víctima de un cáncer. Tenía 69 años.
Su propio hijo y su manager han confirmado la noticia y han pedido respetar la intimidad de la familia en este tiempo de duelo. Bowie llevaba 18 meses tratando de superar un cáncer.
Apenas hace una semana que el cantante estrenaba un nuevo álbum titulado Blackstar, pero su huella en la cultura pop contemporánea es mucho más profunda, y especialmente querida para los entusiastas de la ciencia ficción. Desde su primer gran hit, Space Oddity, a álbumes como The Man Who Sold the World y álbumes como Ziggy Stardust and the Spiders from Mars, Bowie ha sabido imaginar como nadie a personajes fantásticos.
El artista nos deja también apariciones en el mundo del cine como su interpretación del inventor Nikola Tesla en The Prestige. También trabajó con Scorsese en La última tentación de Cristo y hasta se interpretó a sí mismo en comedias tan gamberras como Zoolander. Muchos le seguiremos recordando por uno de sus primeros papeles: El hombre que vino de las estrellas. Buen viaje, David. Te echaremos mucho de menos.
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